Desde jubilaciones hasta el piso para pagar Ganancias: todo lo que cae atado al Salario Mínimo

Milei decidió una suba de apenas el 30% en dos cuotas, y el salario mínimo, que condiciona muchos programas, rondará sólo los 200 mil pesos en marzo.

Finalmente, y aunque había asegurado que no iba a fijar por decreto el nuevo monto del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVyM), Javier Milei cumplirá la ley que obliga al gobierno a laudar y fijar el valor de ese haber inicial cuando no hay acuerdo en la mesa del Consejo del Salario.

Eso sí, para hacerle frente a una inflación acumulada del 85% desde el último incremento, el Gobierno dispuso otorgar un escaso aumento de apenas un 30%, y además en dos cuotas, que llevarán el salario mínimo a sólo unos $200.000 (exactamente: $180.000 en febrero y $202.800 en marzo).

El Presidente tomó la decisión bastante después de la frustrada reunión del Consejo del Salario del viernes pasado, que generó el enojo de la CGT y las CTA, que acusaron al Gobierno nacional de boicotear la negociación. Su primera reacción fue decir que no pensaba fijar un «precio» (sic) mínimo. Pero después hubo un cambio de rumbo.

Hay que recordar que los gremios estaban reclamando un salario mínimo de $288.600 a partir del 1º de febrero.

Ahora, si finalmente queda fijado nada más que en $202.800 esto afectará directamente a la jubilación mínima y a varios programas sociales, que están atados al haber inicial.

También al mínimo no imponible del impuesto a los Mayores Ingresos que reemplazó el Impuesto a las Ganancias de Cuarta categoría (salarios) derogado el año pasado por Sergio Massa.

Todo lo que afecta el salario mínimo

El SMVM es, por ejemplo, la base para el cálculo del programa Potenciar Trabajo, que por lo tanto quedaría en alrededor de $100.000, ya que los beneficiarios reciben la mitad del salario mínimo por una labor de cuatro horas diarias. No obstante, el Gobierno sugiere desvincular esta fórmula.

Además, está establecido que la jubilación mínima no puede ser inferior al 82% del SMVM, por lo cual el Gobierno paga un plus para llegar a esa suma cuando no se alcanza a través de la fómula de actualizacion jubilatoria.

Con el salario mínimo en $ 180.000, el piso de las jubilaciones será de $147.600 en febrero. Y en marzo, cuando el SMVM suba a $202.800, la jubilación mínima quedará en $166.296.

Qué pasa con Ganancias

La suma que se determina para el salario mínimo también impacta en las ya retrasadas Becas Progresar y en la AUH. A la vez que determina la exclusión del Impuesto a las Ganancias (ahora denominado Mayores Ingresos) para aquellos que ganan menos de 15 salarios mínimos.

En este sentido, el piso a partir del cual los trabajadores sufrirán el descuento del impuesto será de $2.700.000 (bruto) en febrero y de $3.042.000 en marzo. Esto, siempre y cuando no el Gobierno no insista con el plan que se cayó junto con la Ley Ómnibus, que establecía un piso de $1.250.000 con actualización cada tres meses.

¿Cómo habrían quedado estas cifras si se aceptaba el pedido de la CGT? En ese caso, la jubilación mínima habría pasado a $236.600 en marzo. Y el piso para pagar ganancias, a $4.299.000.

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Salvo para el cálculo de ese tributo, el incremento del salario mínimo no tiene demasiado impacto en el sector privado, porque la mayoría de los convenios colectivos de trabajo ya pagan sueldos básicos por encima de los $180.000.

Claro que un incremento importante del salario mínimo empujaría al alza principalmente los sueldos de los gremios que tienen haberes más bajos: en muchas actividades, el haber inicial ronda apenas los 200 mil pesos.

De acuerdo a la información que empezó a trascender el fin de semana, «el Gobierno emitirá un laudo donde habilitará una suba en dos cuotas. La primera a cobrarse por un 18% o 19%, y la segunda por un 11% o 12%, con lo que el haber mínimo llegaría a unos $202.800 a partir del tercer mes del año». 

Milei y una nueva contradicción

El último aumento del SMVM se hizo efectivo en diciembre del año pasado y contemplaba la inflación hasta octubre de 2023. Desde entonces y hasta enero, la inflación se calculó en un 85%, según el INDEC. 

Por eso fue que la CGT y las CTA reclamaron ese porcentaje de suba. Sin embargo, con el aumento previsto por Milei quedaría en un 55% por debajo de lo que ya había perdido.

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El viernes pasado, el Presidente había señalado que «eso de estar fijando precios mínimos (sic) no nos gusta. Esa es una cuestión que tiene que ser abordada por los trabajadores con sus empleadores. No creo en que un político pueda determinar un precio a mano».

Además, en declaraciones a Radio Rivadavia, agregó: «¿Yo voy a emitir un decreto fijando un precio? Acá el profe (José Luis) Espert me acaba de hacer el símbolo que usaban los emperadores romanos cuando mandaban a matar al gladiador».