Al finalizar el mandato de Alberto Fernández, el INDEC contaba 822 mil desempleados en el país, un número muy bajo, aunque había algunas provincias más complicadas que otras.
El INDEC, por medio de un estudio realizado en el mercado laboral, reveló que la tasa de desocupación se ubicó en 5,7% durante los meses de octubre, noviembre y diciembre del 2023, en el tramo final del gobierno de Alberto Fernández.
Con esta cifra se iguala la tasa del periodo julio, agosto y septiembre, en donde ya se había mejorado por 0,6 puntos porcentuales el índice medido en los últimos tres meses del 2022.
La tasa de empleo se ubicó en 45,8%, lo que refleja una mejora de 0,3 puntos en relación al tercer trimestre de 2023 y una recuperación de 1,2 puntos en comparación al último periodo del año 2022.
Cabe destacar además que en el último año de Alberto Fernández creció 1 punto la tasa de actividad (pasó de 47,6% a 48,6%), lo que significa que a fin de año había más personas activas en el mercado laboral.
En la medición de cantidad de personas, el INDEC precisa que pertenecen a la población económicamente activa 14.340.000, de los cuales 13.518.000 están trabajando (son ocupados) mientras que 822.000 están buscando un empleo (son desocupados). En la comparación interanual se deduce que hay 53.000 desocupados menos que en 2022.
Los «extremos» de Alberto Fernández
Pese al índice general de desocupación de 5,7%, hay ciudades que mantienen un nivel de desempleo más alto. Según el Indec, el aglomerado con mayor desocupación del país es Mar del Plata, que en el cuarto trimestre de 2023 alcanzó una tasa de desocupación del 9,3%. En segundo lugar los partidos del Gran Buenos Aires, con 7,4%, y Gran Santa Fe, con un 6,3% de desempleo.
En contrapartida se encuentra el aglomerado formado por Viedma y Carmen de Patagones, donde el índice de desempleo es de apenas 0,6%. Le siguen Santiago del Estero-La Banda (1%), Gran San Luis y Comodoro Rivadavia-Rada Tilly (ambos con 1,8%).
YPF, MOYANO Y VACA MUERTA: TRES PATAS DE UN CONFLICTO QUE PODRÍA GENERAR FALTANTES DE NAFTA
Con respecto a la tasa de empleo, el aglomerado que más se destaca es de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), con un índice de ocupación del 52,9%. Se trata, por el momento, de la única ciudad con un nivel de empleo superior al 50%. Segundo en el ranking de ocupación figura Ushuaia-Río Grande (48,6%) y en el tercero aparece Neuquén-Plottier (50,2%).
Por su parte, las ciudades con menos ocupados son Formosa (37,8% de tasa de ocupación), Comodoro Rivadavia-Rada Tilly (38,7%) y Concordia (39,2%).
En busca de trabajo
Como se mencionó más arriba, 822.000 personas pertenecen a la categoría de desocupados, es decir que están activamente buscando un empleo y no tienen otra fuente de ingresos que los sustente.
Sin embargo, los desempleados deben competir contra otro grupo de la población que se encuentra en una situación más favorable.
Se trata de quienes tienen un empleo, pero aún así se mantienen activos buscando otra fuente de ingresos.
El INDEC indica que hay 2.227.000 personas que son “ocupadas demandantes de empleo”. No detalla cuántas buscan un segundo trabajo y cuántas buscan simplemente cambiar de trabajo, pero lo cierto es que se mantienen atentas a las nuevas oportunidades y compiten de forma directa con los desocupados.
De ahí se desprende que hay al menos 3.049.000 en el país que están intentando conseguir un nuevo puesto laboral.
Trabajo en negro
Según esta medición del último trimestre del 2023, en el país hay 13,5 millones de ocupados, lo que representa una mejora de 0,4 millones de personas empleadas en comparación al mismo periodo de 2022. Todos ellos entran en la categoría de asalariados.
Ahora bien, el dato interesante, es que de los 400 mil puestos de trabajo creados, 200 mil pertenecen a la categoría de empleo en blanco y 200 pertenecen al empleo en negro. Eso quiere decir que el mercado laboral necesita seguir acudiendo a la informalidad para generar nuevos puestos de trabajo.
Hacé tu comentario