Paro de subtes y caos de horarios: a qué hora andará cada línea este miércoles
Paro de subtes por la muerte de otro trabajador por el asbesto: qué piden los Metrodelegados
El paro de subtes de mañana incluye al Premetro. Entre sus demandas, el gremio de Metrodelegados exige el cambio de los vagones contaminados con asbesto.
Luego de que la semana pasada se registrara la cuarta muerte de un trabajador a causa del asbesto, los Metrodelegados anunciaron un paro de subtes y premetro para este miércoles, que se llevará a cabo de manera escalonada. Además, el gremio planteó una serie de demandas, entre las que se incluye el cambio de las formaciones contaminadas por el material cancerígeno.
La Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSYP) comunicó que “las medidas de autodefensa” comenzarán en las líneas A y B del subte, que se detendrán de 10 a 12 horas. Luego, de 12 a 14 horas, será el turno de las líneas D y H. Y finalmente, de 14 a 16 horas, se verán afectadas las líneas C, E y el Premetro.
El gremio remarcó que el empleado fallecido, que se llamaba Jorge Navarro, “integraba la lista de los 107 trabajadores afectados por asbesto reconocidos por la Superintendencia de Riesgos del Trabajo”.
Un paro de subtes por una tragedia “evitable”
Además, expresó que la situación les provoca “profunda tristeza e indignación” debido a que “pudo haberse evitado”, ya que, a pesar de la prohibición del asbesto en Argentina desde 2003, “durante muchos años” el personal estuvo cumpliendo funciones “sin ser informado de la presencia” de esta sustancia cancerígena en su “ámbito laboral”.
En el comunicado firmado por Roberto Pianelli, secretario general, y Néstor Segovia, secretario adjunto, también se denunció que “las autoridades lo negaron”, hasta que el sindicato “demostró que los trenes CAF 5000 contenían ese mineral cancerígeno usado como aislante”.
Y se afirmó que desde 2018 han realizado “cientos de denuncias ante todos los organismos responsables” y han presentado “un Amparo Ambiental en la Justicia porteña”. Sin embargo, nada cambió.
Lo que los Metrodelegados están exigiendo en este momento es, en primer lugar, “el urgente cambio de las flotas que contienen asbesto” y que no se dilate más “la licitación de trenes para la línea B”, además de la necesidad de “acelerar las tareas de descontaminación sobre la base de un plan integral de desasbestización”.
Además, plantearon que “todas las personas que trabajan en el Subte y Premetro deben ser incorporadas a la vigilancia médica”, la cual debería extenderse a los trabajadores jubilados, considerando que «el período de latencia de la enfermedad puede ser de varias décadas”.
“Que cumplan el fallo judicial”
Andrea Salmini, secretaria de prensa del gremio, insistió en dejar en claro que “estas medidas son en respuesta al fallecimiento de nuestro compañero Jorge Navarro, trabajador del taller de Constitución, víctima de la exposición al asbesto en el subte y el Premetro”.
Y agregó: “Estamos doloridos e indignados, porque su muerte podría haberse evitado. En la Argentina, el asbesto está prohibido desde el año 2003, sin embargo, durante muchísimos años nos hicieron trabajar sin informarnos de la presencia de ese material cancerígeno. Les pedimos a las autoridades que se hacen las distraídas que cumplan el fallo judicial y realicen la desasbestización completa del subte”.
El asbesto es un mineral formado por fibras largas, delgadas y flexibles, que funcionan como aislantes del calor, la electricidad y el sonido. Por eso se usa en la construcción, para embragues, frenos y filtros para autos. Pero se encuentra prohibido en decenas de países, incluida la Argentina, porque es una sustancia altamente cancerígena cuando ingresa en las vías respiratorias.
Según la OMS la exposición al asbesto es una de las principales causas de cáncer laboral en el pulmón, la pleura, la laringe y los ovarios. También genera asbestosis, otro nombre de fibrosis pulmonar.
Hay que recordar que en 2011 en Madrid, España, se decidió sacar de circulación algunos vagones debido a su mal funcionamiento y porque tenían asbesto. Y en 2014 el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo por entonces de Mauricio Macri, compró los vagones contaminados con asbesto al Metro de Madrid.
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