Maturano y el Gobierno, una batalla que va más allá de los trenes y las peleas salariales
Maturano, uno de los principales enemigos para el Gobierno dentro del plano sindical.
El líder de La Fraternidad cree que le hacen pagar su cercanía con Luis Barrionuevo. Para el Ejecutivo, es Maturano quien obtura el diálogo.
Omar Maturano, el secretario general de La Fraternidad, vuelve a protagonizar un nuevo round contra el Gobierno por falta de acuerdo paritario. Además de confirmar una nueva medida de fuerza para este martes, con reducción del tope de velocidad de las formaciones de trenes, lo que generará demoras en el servicios y quejas al por mayor, advirtió que se terminó «la paciencia» con el Gobierno.
El líder sindical de los maquinistas de trenes, un hombre que responde a Luis Barrionuevo, se mantiene en la vereda de enfrente de la gestión Javier Milei desde el minuto uno.
Esto no es solo por la enemistad entre su referente gremial y el Presidente, que data desde la campaña electoral 2023, y que estalló una vez que finalizó a primera vuelta, sino porque Maturano cree que el oficialismo “lo opera” por todos los medios posibles por estar del lado del jefe de los gastronómicos.
En el maturanismo crece la bronca contra los informes televisivos sobre sus bienes y su crecimiento patrimonial en medios afines a la administración libertaria.
En Balcarce 50 no ocultan la inquina hacia Maturano y se quejan de que no es un dirigente de diálogo -toda una curiosidad, viniendo de un gobierno que no suele cultivar las buenas relaciones- sino todo lo contrario.
Dentro del Ejecutivo resaltan, no obstante, que en estos meses lograron reunirse con gran parte de la CGT y otras representaciones sindicales, y que la Secretaría de Trabajo de la Nación al mando de Julio Cordero va avanzando en acuerdos paritarios.
Las palabras de Maturano
Maturano, por su parte, apuntó que es necesario volver a la pelea contra el oficialismo. En este contexto fue que dijo que el martes los trabajadores cumplirán tareas durante toda la jornada con “un tope de velocidad de hasta 30 kilómetros por hora en todo el territorio nacional”.
En un documento, Maturano sostuvo que “la paciencia tiene un límite”, por lo que la organización sindical dispuso para el martes próximo y durante 24 horas aplicar “un tope de velocidad en todas las formaciones de hasta 30 kilómetros por hora en la circulación de trenes en todo el territorio”.
“La decisión del Secretariado Nacional se fundamentó en la postergación de la medida de fuerza de forma oportuna anunciada para el 4 de junio último, lo que había sido solicitado por el Gobierno, pero luego de cuatro reuniones paritarias consecutivas no hubo acuerdo alguno, a pesar de que el gremio demostró la mejor de las predisposiciones para lograrlo”, aseguró el dirigente sindical.
«Se agotó el diálogo»
Maturano sostuvo que “la voluntad negociadora del sindicato no fue efectiva, ya que el sector empresario tuvo más de 15 días para mejorar una propuesta salarial que reflejase los índices inflacionarios para mantener el poder adquisitivo alimentario, que está siendo licuado de manera sistemática desde enero de este año”, aseguró el gremialista en el documento de prensa.
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“Se agotaron todas las instancias de diálogo, por lo que La Fraternidad retomará desde el martes próximo el plan de lucha gremial que de forma oportuna fue postegado“, concluyó Maturano.
La decisión gremial de La Fraternidad implicará demoras de todas las formaciones nacionales a partir de “la irresoluta decisión de mejorar los salarios de los trabajadores”, explicó la organización.
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