Elecciones en la UTA: el triunfo de Roberto Fernández postergó de nuevo el deseo de los Moyano
Con el 68% de los votos, el oficialismo derrotó a Miguel Bustinduy, quien tuvo el apoyo de los camioneros, que hace tiempo buscan hacer pie en el gremio de los colectiveros.
En una elección que se extendió durante dos días, finalmente Roberto Fernández resultó reelecto como secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el poderoso gremio de los colectiveros. Y la victoria fue contundente, ya que obtuvo el 68%, mientras que el candidato opositor, Miguel Bustinduy, se quedó con el 32% restante.
Los comicios se llevaron a cabo entre jueves y viernes, pero los resultados oficiales se conocieron recién el fin de semana. Y los mayores derrotados fueron Hugo y Pablo Moyano, quienes apadrinaron al candidato opositor.
El apoyo, claro, no es desinteresado: los referentes camioneros hace años que buscan hacer pie en el gremio de los colectiveros, pero siempre sin éxito. Ahora Fernández demostró su poder y conducirá los destinos de la UTA durante cuatro años más.
Para el moyanismo, en tanto, esta no es la primera derrota importante que, de manera indirecta, sufren este año. Este año también se había metido en la interna del Sindicato de Comercio, apoyando a Ramón Muerza. Y la derrota también fue por paliza, ya que Armando Cavalieri recibió el 70% de los votos.
La primera vez que Fernández tuvo oposición
Según informaron desde la UTA, el acto electoral se desarrolló de forma «limpia, transparente y sin incidentes». Y fue la primera vez que la lista de Fernández se enfrentó a una nómina opositora a nivel nacional.
Respecto a Bustinduy, hay que recordar que supo ser el Secretario de Organización del ahora reelegido secretario general. El quiebre entre ambos, que se produjo hace más de cuatro años, lo catapultó como el principal opositor.
Desde entonces sumó, como respaldos, a los Moyano y el poderoso Grupo DOTA, uno de los pilares de la actividad.
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Como gremio del transporte, la UTA tiene un fuerte poder: es casi el único que puede garantizar -junto con el sindicato de los maquinistas de trenes- el éxito de un paro general. Con un paro de los colectiveros, se consigue que prácticamente no haya actividades.
Fernández y el jefe de los maquinistas de La Fraternidad, Omar Maturano, son históricos aliados en la interna cegetista. Rompieron el año pasado con la Confederación de Gremios del Transporte (CATT), donde tiene una influencia decisiva el moyanismo, y ahora integran una estructura paralela de gremios del transporte.
El escándalo en las anteriores elecciones de UTA
El hecho de que estas elecciones se hayan realizado sin incidentes no es un dato menor, tomando en cuenta lo que pasó hace casi tres años: el 16 de diciembre de 2019 un sector disidente que se referenciaba en Bustinduy atacó el gremio.
Lo que ocurrió aquel día fue un verdadero escándalo, y quedaron registrados varios videos donde se veía a activistas avanzando por la avenida Belgrano con palos atravesados por clavos.
Esas personas entraron por la fuerza y tomaron por asalto a la UTA. Además, cometieron todo tipo de destrozos y golpearon a dirigentes alineados con el oficialismo del gremio.
Los atacantes, además, se llevaron documentación del sindicato, computadoras, servidores informáticos, y también los televisores, equipos de audios, lavarropas, bicicletas y cocinas que se rifarían en un sorteo de fin de año.
En medio de esa locura que se vivió, Fernández debió escaparse por los techos del gremio y buscó refugió en un edificio lindero. Algo muy diferente, claro, a lo que sucedió esta vez, cuando estuvo gran parte del día viernes en la sede de la UTA ubicada en Moreno 2969, en el barrio de Once.
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