Rebelión de seccionales y agrupaciones opositoras al acuerdo salarial que busca firmar Armando Cavalieri
Luego del anuncio, las cámaras empresariales se retiraron de la mesa de negociación, frustrando el convenio. Distintos sectores afirman que la suba no es del 41 por ciento como se anunció, sino del 12 por ciento. Esta es la segunda vez que la dirigencia de la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS) hace un anuncio y la patronal lo desmiente.
Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical
La semana pasada, mediante un comunicado, la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS) anunció un acuerdo salarial con las cámaras del sector, por el cual cerró la paritaria de este año, con una suba del 41 por ciento a partir de sumas fijas mensuales, que lleva el piso salarial de los trabajadores en unos 50 mil pesos. Su firma debía formalizarse el martes de esta semana, pero el sector patronal faltó a la cita, trabando el convenio. A partir de esto, el gremio que conduce el histórico dirigente Armando Cavalieri se declaró en “alerta”, lo que obligó al Ministerio de Trabajo a declarar la conciliación obligatoria.
La frustrada paritaria despertó duras críticas a la conducción sindical de seccionales gremiales y agrupaciones dentro de la estructura mercantil. El malestar no sólo apuntó a la imposibilidad de poner en marcha el aumento, sino que además puso en dudas las cifras ofrecidas por la federación, ya que los cálculos de algunos dirigentes afirman que el incremento “es de sólo el 12 por ciento”. En tanto, desde el entorno de Cavalieri habla de un “bloqueo patronal”, y busca evitar que el escándalo agite una interna desde hace un tiempo complicada en el sindicato más grande de la Argentina.
La ausencia de la Cámara Argentina de Comercio (CAC), la Confederación de la Mediana Empresa (CAME) y la Unión de Entidades Comerciales (UDECA) en la firma dela cuerdo despertó las críticas de la conducción mercantil, y aumentó el malestar de la dirigencia de distintas seccionales del gremio, y de sectores opositores. El primero el criticar el fallido convenio fue el Sindicato de Empleados y Obreros de Comercio y Afines zona Oeste (SEOCA), que conduce el dirigente Julio Rubén Ledesma.
Mediante un documento, el sindicato aclaró que “no estamos de acuerdo” con el acuerdo firmado por la federación, ya que considera que el aumento “equivale a un aumento del 12 por ciento”. Según explicó el texto -al que tuvo acceso Gestión Sindical-, el aumento del 41,6 por ciento que anunció el gremio “se han considerados incrementos que fueron acordados como reajuste de loa paritaria del año pasado”, por lo tanto “no corresponde como una nueva actualización salarial terminó provocando más críticas que elogios.
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Por su parte, Mario Amado, referente de la agrupación La Voz de Comercio, coincidió que la suba es mucho menor a la anunciada. “El acuerdo, como se iba a firmar era un mamarracho, porque se salió a anunciar un aumento del 41 por ciento cuando en la realidad no supera el 12. Querer hacerle creer a los trabajadores de un aumento que no existe es faltarle el respeto a la inteligencia”, sostuvo Amado.
En diálogo con Gestión Sindical, el dirigente aseguró que “se sabía que se iba a frustrar el acuerdo, porque a quien se lo quiere hacer firmar es uno de los sectores más castigados durante la pandemia”. Desde la agrupación, para salvar esto piden “negociación por rama”, ya que el 70 por ciento de los trabajadores de comercio están en actividades castigadas por la pandemia. “Era lógico que la negociación, que estuvo mal hecha y mostró la incapacidad de la FAECYS, iba a ser a la baja”, ratificó Amado.
Para el dirigente, el anuncio prematuro del acuerdo paritario terminó siendo “un tiro por la culata” a la dirigencia, porque “hasta un mal acuerdo como el presentado fue rechazado por las empresas”. El dirigente opositor habló de la “irresponsabilidad de quienes nos representan a los trabajadores de comercio, porque haber sacado un comunicado oficial de la FAECYS anunciando un aumento que no fue firmado habla de la poca seriedad que tienen para trabajar, lo que es una costumbre, ya lo hicieron con los bonos negociados en pandemia”.
Los trabajadores y trabajadoras no podemos seguir presos de la indiferencia de unos y la incapacidad de otros . Pedimos pago a cuenta de futuros aumentos @lpsargentina @ludistas @NazaLomagno @GinoViglianco @Gatosylvestre @MinTrabajoAR @GSindical @EnfoqueSindical pic.twitter.com/qqkyBAl9fQ
— Agrupacion La Voz De Comercio (@lavozdecomercio) September 24, 2020
No es la primera vez que la conducción de la federación anuncia un acuerdo salarial que luego no se cumple. En julio pasado, se afirmó que los trabajadores de supermercados cobrarían un bono por trabajar durante la pandemia, pero desde la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) lo desmintieron. “Se terminó cobrando tres bonos de 5 mil pesos, ahora pedimos que mientras se discute la paritaria se paguen aumentos a cuenta de futuros acuerdos, y extender estos bonos a los esenciales hasta que dure la pandemia, algo que la dirigencia ni pidió”, dijo Amado.
Por su parte, las cámaras empresariales explicaron su postura mediante un comunicado conjunto, y ratificó que no llegó a ningún acuerdo. “La crisis económica actual, severamente agravada por la pandemia, en el marco de las falencias macroeconómicas de larga data, han dificultado la definición del otorgamiento de incrementos salariales, exigiendo especial prudencia”, sostuvo el documento firmado por la CAME, ACA y UDECA.
“Estamos convencidos que una mejora de los salarios de nuestros colaboradores representa un círculo virtuoso que regresa al consumo, pero desde este momento, desde el sector empresario con miles de empresas cerrando, estamos haciendo un gran esfuerzo para sostener la actividad y los puestos de trabajo”, recalcaron.
La sidas y vueltas por el acuerdo generan malestar en las bases del gremio de comercio. “Si ves la página oficial del sindicato, los mensajes contra el acuerdo paritario sin mayoría, hay un clima horrible, además el acuerdo queda un vacío de cinco meses, porque la vigencia del acuerdo es de siete meses”, aseguró Amado. El malestar se extiende a la interna del gremio, en especial por el pronunciamiento del SEOCA.
“Esto habla de un cambio de actitud de los dirigentes que ante la reacción de las bases decidieron salir a reclamar lo que es justo, que se extiende en todo el país”, concluyó el referente de la agrupación La Voz de Comercio.
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