Trabajo dictó otra conciliación en el conflicto de Sanidad y frena el paro del jueves
El gremio de Héctor Daer buscaba profundizar su plan de lucha, ante la falta de avances para el acuerdo salarial. Las empresas insisten en que su situación financiera les impide dar la suba del 45%.
El Ministerio de Trabajo dictó hoy una nueva conciliación obligatoria, por cinco días de vigencia, en el marco del conflicto salarial que protagoniza el sindicato de la Sanidad, por lo cual quedó impedido de realizar el paro de 24 horas que había convocado para este jueves.
La cartera laboral dispuso «prorrogar a partir de las 00 (cero) horas del día 28 de julio de 2021 y por el término de cinco (5) días la conciliación obligatoria dictada el 30 de junio de 2021, impuesta a la Federación de Asociaciones de Trabajadores de la Sanidad Argentina y sus sindicatos adheridos, y las empresas».
Esta nueva conciliación tiene 10 días menos de extensión y no incluyó un llamado a las partes para realizar una audiencia en la sede de la cartera laboral con una fecha fijada. En la anterior oportunidad, el Gobierno sí convocó a una reunión pero luego la terminó suspendiendo, alegando que estaba trabajando en hallar una solución al financiamiento de las compañias del sector.
Sanidad realizó el paro por turnos en clínicas y sanatorios, y aún no hay salida al conflicto
La nueva intervención de la cartera de Claudio Moroni exhortó a las partes a «mantener la mejor predisposición y apertura para continuar negociando los temas sobre los cuales mantienen diferencias y contribuir de esta manera, a la paz social y a mejorar el marco de las relaciones laborales en el seno de la empresa involucrada».
Este lunes por la noche, la Federación de Trabajadores de la Sanidad (FATSA) había anunciado un paro de 24 horas en clínicas y sanatorios privados de todo el país por su reclamo salarial del 45% de aumento, en medio de un conflicto que se sigue extendiendo en medio de la pandemia.
«Las escalas salariales se encuentran vencidas y luego de largas negociaciones no se ha podido acordar una nueva escala en cada convenio colectivo», advirtió el sindicato. Denunció además que «los representantes patronales se han negado sistemáticamente a concretar los justos aumentos salariales que reclamamos».
Durante dos semanas rigió la conciliación anterior pero durante todo ese plazo y habiendo transcurrido ya cinco días de su vencimiento, el Gobierno no logró cerrar con las compañías privadas del sector una solución a su financiamiento para así destrabar el conflicto salarial.
El viernes último, al día siguiente del vencimiento de la conciliación, el gremio que representa a enfermeras y camilleros realizó paros de cuatro horas por turnos, mientras que luego decidió endurecer su postura ante la falta de avances y llamó a una medida de fuerza para el jueves, que al final no podrá concretar.
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La negativa empresarial
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Por su parte, los empresarios insisten en que no están en condiciones de dar un aumento salarial si antes no se
actualizan los aranceles que definen los financiadores (obras sociales, prepagas y el PAMI). Esa decisión está subordinada al incremento en las cuotas de la medicina privada y el Gobierno aún no resuelve ese punto.
«Como empleadores de más de 320 mil personas en todo el país, asumimos nuestra responsabilidad de generar los recursos necesarios para pagar salarios y poder prestar servicio normalmente, pero esos recursos no los generamos libremente en el sistema de salud en el que interactuamos ya que no somos formadores de precios», recalcó la Federación de Prestadores de Salud (FAPS) respecto del conflicto.
Los empresarios pretenden que el Gobierno autorice el alza en las cuotas de las prepagas, para llegar a una solución y, en ese marco, un grupo de firmas logró un fallo judicial favorable hace unos días y lanzaron la versión de una inminente suba del 26 por ciento en las cuotas, pero hasta ahora se sigue negociando.
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