Pablo Moyano dijo que «hoy el peronismo es un cambalache» y lanzó «un llamado a la unidad»
El cotitular de la CGT pidió que se discuta «un plan para ser más competitivos» y, también, «para que la derecha no tenga chances de volver» al Gobierno.
El cosecretario general de la CGT, Pablo Moyano, consideró que «hoy el peronismo es un cambalache» y, en ese sentido, lanzó «un llamado a la unidad» para elaborar «un plan para ser más competitivos» de cara a las elecciones presidenciales de este año, «para que la derecha no tenga chances de volver».
Analizando el escenario electoral, el también secretario adjunto de Camioneros propuso este martes hacer «un llamado de unidad a todas las vertientes» del Justicialismo para las elecciones. Y aseguró que más allá de ocupar o no un cargo, en el futuro su deseo es «que el peronismo siga gobernando el país».
Además, en declaraciones a AM530, planteó: «El presidente del PJ nacional es Alberto Fernández, y el presidente del PJ provincial es Máximo Kirchner. Ellos deberían convocar y sentar al sindicalismo, a todos los movimientos sociales, a la parte política, a los gobernadores y a los intendentes».
En ese contexto fue que consideró que «hoy no hay alguien con autoridad suficiente para que nos conduzca», concluyendo en que «hoy el peronismo es un cambalache, sin conducción nacional ni provincial».
Las chances del peronismo y una derecha «de terror»
Más allá de sus críticas al PJ, Moyano señaló que la próxima elección «no es imposible» para el peronismo, porque «la derecha que hay enfrente es de terror». Y también planteó que, como estrategia, «el peronismo debería aprovechar el crecimiento económico que estamos teniendo en el país para que la derecha no tengan chance de volver».
Sin términos medios, remarcó que «lo peor que puede haber en la política es la derecha», insistiendo en que «todas las vertientes del peronismo nos sentemos a discutir un plan para llegar a ser más competitivos», y aclarando que «luego en las PASO cada uno elegirá su candidato».
Respecto a su situación personal, dijo que «yo no me muero por un cargo. Yo quiero que el peronismo siga gobernando el país porque, más allá de los errores, (el peronismo) es el único que le puede dar soluciones a lo que hoy están pasando los argentinos». Por eso enfatizó una vez más que «vamos a hacer lo imposible para que la derecha no vuelva, y después los cargos son secundarios«.
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Por otra parte, el sindicalista consideró «acertadas» las medidas económicas que está tomando el Gobierno nacional para frenar la inflación, y aseguró que desde el Sindicato de Camioneros «estamos colaborando con la Secretaría de Comercio para que los lácteos, gaseosas y aguas lleguen a las góndolas».
A la vez advirtió que «hay supermercados que esconden las mercaderías para aumentar el precio más adelante, y a esos los estamos denunciando».
Pablo Moyano, contra Aracre y la Corte
Durante la entrevista Moyano también profundizó sus cuestionamientos al nuevo jefe de asesores presidenciales, Antonio Aracre, recordando que «yo casi estoy preso por oponerme a la reforma laboral de Macri. ¡Y ponemos un lobo a cuidar al gallinero!».
Además, apuntó que «este tipo viene del palo de los empresarios que más han explotado a sus trabajadores, que viven una realidad totalmente distinta a los laburantes, y le damos el curro del jefe de asesores».
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Y, contundente, remató: «¿Qué es ‘jefe de asesores’? Seguimos pagando sueldos a estos impresentables que nada tienen que ver con los laburantes».
Por último, disparó también contra la Corte Suprema, en horas decisivas para el inicio del tratamiento del juicio político a sus cuatro integrantes. «Estos tipos gobiernan con decretos, leyes y fallos que perjudican al país. Estoy de acuerdo», dijo sobre el pedido de enjuiciamiento al máximo tribunal, que ya fue recibido por la titular de la Comisión de Juicio Político de Diputados.
«Si a un dirigente gremial lo meten en cana y a una vicepresidenta la condenan, ¿quiénes son estos tipos para que no sean por lo menos interrogados o llevar adelante un juicio político? ¿Qué son? ¿Dioses? También deberían rendirle cuentas al pueblo», concluyó.
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