El dirigente de SMATA le apuntó duramente al sector dialoguista de la CGT. “Es muy triste el papel que están haciendo”, dijo.
En medio de la que fue una semana muy caliente en la CGT, que tras una discusión interna resolvió no hacer paros en lo que queda del año, el número dos de SMATA, Mario “Paco” Manrique, apuntó con todo contra la central obrera, calificando a sus dirigentes de “idiotas útiles”.
El también diputado nacional de Unión por la Patria, quien hace poco más de un mes renunció a la secretaría gremial de la CGT, centró sus críticas en el sector dialoguista, considerando que «es muy triste el papel que está haciendo».
Además consideró que «pretender buscar equilibrios y consensos con este Gobierno es perder el tiempo», porque “yo puedo tener aspiraciones de negociación en un Gobierno que no sea de mi palo ideológico pero que tenga algo de coherencia».
Manrique contra el Gobierno
«Este Gobierno eliminó la vereda del medio, no existen los grises. O te paras en lo blanco o en lo negro», apuntó Manrique. Y, de forma contundente, dejó en claro que mantener una tregua hasta el próximo año es un error: «Si no unificamos la conflictividad en la entidad madre que le da un paraguas legal a todo el movimiento obrero estamos haciendo el papel de idiotas útiles. ¿Qué va a cambiar el 2025?».
Luego señaló: “Yo creo que los compañeros de la CGT hicieron un análisis equivocado de la situación y no están a la altura de las circunstancias que está viviendo el pueblo argentino”.
Y advirtió que a los trabajadores se les va a terminar la paciencia: «Si seguimos así los laburantes le van a pisar la espalda a la CGT, porque es muy triste el papel que está haciendo».
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Por último, dijo que «si el movimiento obrero quiere pelear contra esto primero tiene que dar la pelea adentro y cambiar la conducción. Los muchachos de la CGT tienen que entender que es un ciclo que se agotó».
Hay que recordar que a principios de octubre, cuando comunicó su alejamiento de la central, Manrique explicó que lo hacía porque «esta CGT a mí no me representa. Se vació de contenido, no tiene claro hacia dónde va”. Y afirmó que “se convirtió en cuatro o cinco dirigentes que discuten a escondidas”.
La CGT en llamas
Esta misma semana la conducción de la calle Azopardo anunció que no está previsto un paro nacional de acá hasta fin de año, contradiciendo el pedido de Pablo Moyano de construir una nueva medida de fuerza en diciembre. Un hecho que profundizó la interna entre los dos grandes grupos.
Quien se expresó al respecto fue el dirigente canillita Omar Plaini, quien analizó que el hecho de que haya “dos miradas” respecto del gobierno de Javier Milei debilita la posibilidad de enfrentarlo.
“No es lo mismo una medida llevada adelante por la CGT en forma unánime que llevarla por un sector, por importante que sea”, dijo.
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Y expuso que “evidentemente hay dos miradas en nuestra confederación”. Por un lado, planteó, “una más confrontativa, porque este es un gobierno que te confronta todo el tiempo, te provoca, te agrede, te agravia, con políticas que van obviamente en contra de los intereses que nosotros defendemos y que reivindicamos”.
Mientras que también existe “otra mirada, más dialoguista, de cara al Gobierno. Quizás ahora se profundiza más porque hay un gobierno de carácter anarcocapitalista, como se define el actual Presidente, aunque eso, después, en la práctica, dista mucho de ser así porque, digamos, es cualquier cosa. Es la Biblia contra el calefón”.
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