FAECYS cruzó a la CAME por la falta de acuerdo: “Bloqueo patronal a la dignidad de los empleados de Comercio”

Desde la Federación conducida por Armando Cavalieri aseguraron se había “consensuado con las Cámaras Empresarias el acuerdo paritario” y que al momento de firmar “con gran sorpresa, se nos informa que pese a la aprobación brindada por las otras cámaras, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa se niega abruptamente a suscribirlo”. Declararon el estado de alerta y movilización.

La semana pasada desde el Sindicato de Empleados de Comercio se dio a conocer el acuerdo de una no remunerativa de $5.000 por mes desde septiembre hasta marzo del 2021, sin cubrir los meses entre abril y agosto. Ese incremento del 12% contaba con el visto bueno de la Cámara de Comercio (CAC), pero la publicación del entendimiento sin haberse firmado provocó el enojo de la Cámara de la Mediana Empresa (CAME) y un malestar en las filiales del interior de todas las patronales, lo que derivó finalmente en su rechazo unánime.

La situación se tensó tanto que todo indicaba que Armando Cavalieri iba a declarar un paro, pero el Ministerio de Trabajo intervino dictando la conciliación obligatoria por 15 días.

Mientras tanto, la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECYS) difundió un comunicado titulado “Bloqueo patronal a la dignidad de los empleados de Comercio”, donde se asegura que se había “consensuado con las Cámaras Empresarias el acuerdo paritario”, y que es por ese motivo que luego “se procedió a dar inicio la ronda de firmas de dicho convenio. Es en esa instancia, cuando con gran sorpresa, se nos informa que pese a la aprobación brindada al Acuerdo por las otras Cámaras, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) abruptamente se niega a suscribirlo. Lo hace argumentando con la mera afirmación y sin mayores explicaciones, que no está de acuerdo con dicho convenio”.

En el documento, que lleva la firma de Cavalieri, se destaca que el CAME negó su firma “después de más de 20 días de negociación, de haberse consensuado los términos del convenio y contenido del mismo, y sin haber expresado observaciones alguna durante su discusión”.

Y se sostiene que “agravia también la actitud llevada a cabo por la CAC y UDECA, quienes luego de haber aprobado y comprometido la firma del acuerdo salarial, al tomar conocimiento de la negativa de CAME proceden a negar su firma, todo ello en una franca violación al principio de buena fe que debe regir en las negociaciones colectivas. Esta actitud corporativa empresarial se vuelve a poner de manifiesto en la fecha cuando las tres Cámaras Empresarias declinan la concurrencia a la citación formulada por la Autoridad de Aplicación”.

También se remarca que “no se puede tolerar conductas patronales mezquinas, que priorizando los intereses económicos se desentienden de la vital significación que tiene el salario para los trabajadores y su familia, más aún en medio de la crisis sanitaria como la que nos encontramos viviendo”. Y se manifiesta el enérgico rechazo “al juego perverso de quienes con fines únicamente de mejorar una posición política interna, adoptan actitudes demagógicas jugando ni más ni menos que con la fuente de ingresos de los trabajadores”.

Por último, en el texto se asegura que “hemos siempre mantenido y volvemos a ratificar nuestra plena vocación de diálogo colectivo, pero bajo ningún concepto, toleramos que se avasalle la dignidad de los empleados de Comercio”. Y por eso se advierte que “los trabajadores mercantiles nos declaramos en estado de alerta y movilización, y en plan de lucha en defensa del derecho a un salario digno”.

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