Yasky apuntó contra la CGT por no apoyar el bono de fin de año: «Escupen contra el viento»
El titular de la CTA de los Trabajadores criticó a la central por rechazar un aumento por decreto «en una situación de crisis extraordinaria».
El secretario general de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, apuntó contra la CGT por su postura de aferrarse a la negociación paritaria y no apoyar el pago de un bono de fin de año para paliar la fuerte inflación. «Escupen contra el viento», dijo el diputado nacional por el Frente de Todos, eligiendo esa metáfora para exponer las diferencias que se vienen dando entre el sindicalismo más kirchnerista, que apoya un aumento salarial por decreto, y la CGT, que se opone.
«Es una conducción que, para el movimiento sindical, escupe contra el viento. Hay muchos sectores de la CGT que no se sienten identificados con ese tipo de posición», afirmó Yasky.
En declaraciones a Futurock, advirtió que «es necesario un reagrupamiento del movimiento sindical, con una conducción capaz de expresar las demandas y los cambios profundos que hacen falta en la Argentina, sino va a estar en una especie de actitud de lejanía, de distanciamiento».
Yasky y la necesidad de «un camino alternativo»
También remarcó que «en un momento en el que la inflación sigue siendo alta, y el poder adquisitivo de la mayoría de los asalariados no cubre la canasta básica, hay que buscar un camino alternativo al de las paritarias».
En ese sentido fue que insistió en que hay que «pensar en la posibilidad de una suma fija otorgada a través de una decisión del Gobierno, que después se discuta en la cuenta de la paritaria».
Y señaló que «insistir con un instrumento simplemente porque hay una actitud religiosa de unos dirigentes sindicales, que sólo creen que se puede discutir aumentos salariales en el marco de una paritaria, es un error muy grande».
Para el dirigente oficialista es imperioso avanzar en medidas para «recuperar el poder adquisitivo de los sectores populares». Y alertó que «si solamente aplicamos las medidas de estabilización, vamos a estar generando una condición en que la macroeconomía se estabilice y el bolsillo de la inmensa mayoría de la gente tenga un agujero cada vez más grande».
Por otra parte, también criticó a la CGT por haber acordado en la cumbre de este lunes con el presidente Alberto Fernández celebrar el Día de la Lealtad en Tucumán, junto a gobernadores, funcionarios e intendentes de todo el país.
«Esta decisión de que el 17 de octubre se traslade a Tucumán es el intento de impedir que el pueblo se movilice para poner en la calle un programa donde todos los hilos sueltos formen parte de las demandas», indicó Yasky. Y anticipó para ese día la concreción de una marcha que «servirá para mostrar que el pueblo no está paralizado».
Las claves de la interna por el bono de emergencia
Ante la escalada de precios, el Gobierno nacional ya dejó entrever semanas atrás la posibilidad de implementar un bono de emergencia para todos los asalariados privados.
Esa idea, como fue señalado y hoy lo expuso Yasky, es aceptada por las corrientes sindicales cercanas al kirchnerismo. Pero no es bien vista por la conducción de la CGT, que cree que esos mecanismos a la larga no sirven para que el bolsillo pueda recuperar terreno frente a la inflación.
LOS BANCARIOS FUERON CONVOCADOS POR TRABAJO PARA NEGOCIAR PARITARIAS: QUÉ ESPERA EL GREMIO
Los popes cegetistas prefieren como «mal menor» que se mantenga el actual esquema de «paritarias permanentes», en la que los gremios negocian actualizaciones cada tres o cuatro meses en promedio.
Lo que ocurre es que de esta forma los sindicatos con poder de fuego pueden equipararse al alza de precios, pero no ocurre lo mismo con una gran porción de trabajadores, como los informales, cuentapropistas o monotributistas.
Es por eso que tanto el Gobierno como los sindicalistas apoyan la suma fija, conscientes de que en caso contrario los sectores señalados irremediablemente se verán superados por el efecto inflacionario.
Hacé tu comentario