Renuncia Moroni tras el conflicto del neumático y las presiones del kirchnerismo
Su salida del Ministerio de Trabajo se oficializará mañana, confirmaron a Gestión Sindical fuentes de su entorno. Expectativa por quién será su reemplazante.
El ministro de Trabajo, Claudio Moroni, oficializará mañana su renuncia, confirmaron a Gestión Sindical allegados a uno de los pocos funcionarios «albertistas» que quedaban en el Gabinete. Señalado desde hace tiempo por la vicepresidenta Cristina Kirchner como uno de los «funcionarios que no funcionan», Moroni volvió a quedar en el centro de las críticas luego de la escalada del conflicto del neumático que llegó a paralizar la industria automotriz.
«Si, mañana se oficializa», dijo a Gestión Sindical un hombre de estrecha confianza del inminente ex titular de la cartera laboral. Por estas horas, sonaba una danza de nombres para reemplazar a Moroni, entre ellos el ex abogado de la CGT y ex diputado kirchnerista, Héctor Recalde, e incluso el ministro de Trabajo durante los 12 años de kirchnerismo, Carlos Tomada. Pero lo cierto es que aún no estaba definido y se esperaba que su sucesor se conociera este lunes.
La renuncia de la ministra de las Mujeres, Elizabeth Gómez Alcorta, (el jueves pasado debido a la represión contra integrantes de la comunidad mapuche) desencadenó nuevas tensiones en el seno del Gobierno y la situación sería aprovechada para restructurar el Gabinete nuevamente.
Sucede que a la salida de Moroni se le sumará la de Juan Zabaleta en el Ministerio de Desarrollo Social, quien busca retomar la Intendencia de Hurlingham para intentar retenerla de cara a las elecciones del próximo año.
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Volviendo al alejamiento de Moroni, esto implica, como sucedió con Martín Guzmán, un golpe para la conducción de la CGT que encarnan los «gordos» y los «independientes» de los grandes gremios, ya que se dedicaron todo este tiempo a bancar a los funcionarios albertistas en medio de las críticas del kirchnerismo. Y como pasó con Guzmán, la renuncia sorpresiva de un funcionario que respaldaban vuelve a dejar a los sectores más tradicionales de la central en un lugar incómodo.
Porque, en paralelo, esto representa un «triunfo» para los dirigentes y sindicalistas encolumnados detrás Cristina Kirchner, que venían cuestionando la labor de Moroni en medio de la interna oficialista, que tuvo una tregua tras el intento de asesinato de la ex mandataria, pero que ahora vuelva recrudecer.
Las críticas contra Moroni
Uno de ellos había sido Andrés «Cuervo» Larroque, secretario general de La Cámpora, quien poco después de resolverse el duro conflicto del SUTNA, apuntó durante dos días consecutivos contra el funcionario de confianza del presidente Alberto Fernández y consideró que «hay un déficit en materia de gestión» en la certera laboral.
«Por lo menos en el conflicto del neumático, está claro que si las cosas se prolongan por tanto tiempo y después finalmente se termina comprobando que con dedicación, actitud y voluntad política se puede resolver», planteó Larroque.
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En paralelo se sumaron voces del ámbito gremial (alineadas con el Instituto Patria, claro está), como el titular de Canillitas, Omar Plaini. «En lo que compete al Ministerio de Trabajo, un conflicto no puede durar 5 meses. Quizás había que buscar otra veta para resolverlo«, le espetó el referente del moyanismo.
Así las cosas, en medio de la interna en el frente de Todos, resta saber si el reemplazante de Moroni será un hombre más cercano al Presidente o si finalmente aterriza alguien más ligado a la Vicepresidenta, situación que es seguida de cerca por las diferentes tribus sindicales.
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