Ley Bases y reforma laboral: el sindicalismo ya se prepara para un escenario de conflicto permanente
Fuerte repudio de ATE a la Ley Bases y la represión en el Congreso.
Tras la aprobación en el Senado de la Ley Bases, Rodolfo Aguiar, secretario general de ATE, fue el primero en decir que seguirán defendiendo «los derechos sociales y la libertad sindical».
El sindicalismo que marchó al Congreso para visibilizar su repudio a la Ley Bases que logró sanción en el Senado, reaccionó con cuestionamientos y preocupación por el futuro, además de fuertes denuncias contra los hechos de represión. Rodolfo Aguiar, de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) fue el primero en salir a expresarse, fundamentalmente, sobre la reforma laboral.
“Se legaliza el fraude más grande de la historia. Se trata de una reforma laboral absolutamente regresiva que una vez instalada, será muy difícil de revertir. Con ley o sin ley, la extrema derecha no va a cesar en su intento de quitarnos todos nuestros derechos y someternos a los poderosos”, señaló Aguiar, el secretario general del sindicato de los estatales.
Lo que más inquieta al gremio de toda la Ley Bases es la reforma laboral que aprobó el Senado y no parece tener chances de marcha atrás la Cámara de Diputados, que ya la votó favorablemente cuando trató por primera vez la ley.
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Para el referente gremial, se tratan de modificaciones “absolutamente regresivas» sobre los derechos de los trabajadores.
«Ni un solo artículo supone un derecho o beneficio para las personas que trabajan», expresó.
«El daño» de la Ley Bases
A pesar de los apartados que el Gobierno retiró del proyecto final -en principio, aunque podrían volver a incluirlos en Diputados- como la privatización de Aerolíneas Argentinas y el capítulo previsional, Aguiar sostuvo que “no se aminora el poder de daño que tiene la norma”.
“Con ley o sin ley, la extrema derecha no va a cesar en su intento de quitarnos todos nuestros derechos y someternos a los poderosos”, agregó.
En esta línea, Aguiar indicó: «Con esta ley todas nuestras riquezas serán arrasadas. El Gobierno actual ha decidido poner el Estado al servicio de las corporaciones extranjeras. No caben dudas ce que están convirtiendo a la Argentina en un laboratorio mundial del liberalismo, promoviendo la utopía del mercado autorregulado».
«Nosotros desde ATE seguimos defendiendo un contrato social basado en una sociedad con pleno empleo y salarios dignos, con derechos sociales y libertad sindical. No podemos naturalizar que en la Argentina coexistan la riqueza extrema con la más absoluta pobreza», insistió Aguiar.
Por su parte, el secretario general de la CTA de los Trabajadores y diputado nacional Hugo Yasky no se quedó atrás en sus denuncias y, a la vez, valoró la manifestación popular en la plaza del Congreso: “La masividad de la marcha demuestra que el pueblo argentino rechaza este modelo de país que va a ser para enriquecer a los de siempre y generar más pobreza de la que ya tenemos”.
“Creo que está claro que quienes hablaban de la casta, ahí les están pagando (a senadores) con embajadas, comprándoles el voto de una manera realmente obscena”, subrayó. “Los senadores que hoy acompañaron con su voto tendrán que dar cuenta ante el pueblo argentino de la decisión que han tomado”, completó.
La represión, otro punto
Feduba, el sindicato de trabajadores docentes de la UBA, fue uno de los colectivos sindicales que habló de la represión que se dio en las inmediaciones del Parlamento mientras se desarrollaba la manifestación de gremios, organizaciones sociales y políticas y ciudadanos autoconvocados.
“Con la intención de desalojar las calles, las fuerzas de seguridad utilizaron gas pimienta y camiones hidrantes contra trabajadores que ejercían su legítimo derecho a la protesta, periodistas y varios diputados nacionales que tuvieron que ser hospitalizados debido a las agresiones recibidas”, detalló el gremio en un comunicado.
Remarcó que el operativo fue “cruel” y que “evidencia un espíritu antidemocrático y el claro objetivo de amedrentar al pueblo, que solo expresa su rechazo a medidas que atentan contra sus derechos y la soberanía de nuestro país”.
En el mismo plano, CTERA repudió “enérgicamente la brutal represión ordenada por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, ante una manifestación pacífica, que vulnera de manera grave el derecho a manifestarse en democracia, que emana de la Constitución Nacional”.
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