Gremios estatales porteños logran audiencia pública para forzar una suba de las Asignaciones Familiares
Lo acordaron con la justicia. Será el 18 de febrero, y si bien no es vinculante, esperan que termine de torcer el brazo del gobierno porteño, que inexplicablemente tiene congelado el valor de este beneficio desde 2013 por el irrisorio monto de 270 pesos. “Sólo se entiende por el desprecio a los trabajadores”, dijeron desde ATE Capital, UTE y los metrodelegados, que encabezan los reclamos.
Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical
En diciembre pasado, el gobierno de Mauricio Macri anunció a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) la suba de las Asignaciones Familiares, la ayuda que entrega el Estado a los trabajadores registrados por cada hijo. El incremento fue de un 8,74 por ciento, llevando el valor de esta asistencia a unos 2.700 pesos. Además, la ayuda escolar, otro de los beneficios que financia el ANSES, se elevó a 2.300 pesos. Esta medida por lo general es acompañada por las distintas jurisdicciones, que tienen sus propios planes de ayuda para estatales y otros empleados.
Pero en la Ciudad de Buenos Aires, el distrito más rico del país, las asignaciones están congeladas desde hace siete años. Desde el 2103, que el gobierno porteño no actualiza el valor de esta ayuda que entrega a los hijos de los trabajadores estatales, congelada en 270 pesos, 10 veces menos que lo que cobra un empleado de, por ejemplo, el Estado nacional. Desde hace tiempo que los gremios de la Ciudad pelean contra esta actitud “discriminatoria”, primero de Macri como jefe de Gobierno y continuada por el actual mandatario Horacio Rodríguez Larreta. Este jueves, lograron llamar a una audiencia pública con aval de la justicia, donde buscarán forzar una actualización de los valores que se pagan en la Capital Federal. “Esta actitud sólo se puede entender por el desprecio a los trabajadores”, dijeron luego de lograr el aval judicial a la audiencia.
Los estatales porteños vienen reclamando hace tiempo por el aumento de las Asignaciones Familiares, congeladas desde el 2013. Por eso, este jueves se movilizaron al juzgado en Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo, a cargo de Marcelo López Alfonsín, para pedir su aval a la realización de una audiencia pública que discuta esta situación, y busque una salida, ante la negativa del gobierno de Rodríguez Larreta de dar respuesta a los reclamos.
Encabezaron la jornada de protesta dirigentes y afiliados de ATE Capital Federal, la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y la Asociación de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP), que junto a movimientos sociales se quejaron que luego de siete años, este beneficio esté paralizado en un valor irrisorio: 270 pesos. El encuentro se dio luego de un recurso de amparo presentado por este grupo de sindicatos, que vienen denunciando “la constante pérdida de poder adquisitivo de estas asignaciones familiares”.
“Tendremos la audiencia el martes 18 de febrero, a partir de las 11 horas, según acordamos con el juez”, le confirmó a Gestión Sindical Juan Manuel Sueiro, secretario Adjunto de ATE Capital. El dirigente remarcó que si bien “la audiencia no es vinculante”, es decir, su resultado no es obligatorio para el gobierno porteño, la misma tendrá “un efecto político, ya que todos los estatales estaremos allí, discutiendo por qué los niños de los trabajadores de la Ciudad son discriminados”.
El congelamiento de las asignaciones no tiene una explicación desde el gobierno provincial, y para los gremios no es por falta de recursos. “Es por el desprecio que el gobierno porteño tiene por sus trabajadores”, dijo Sueiro. En este sentido, en la jornada del jueves se difundió un cálculo de la inflación acumulada en estos siete años, se estableció en el 250 por ciento. Además, a eso deberían sumarle la suba de precios de este año, que según las estimaciones recogidas por el Banco central será de más del 40 por ciento.
“La obstinación de mantener el estancadas las asignaciones por hijo en 270 pesos, sólo es posible a partir de entender que Horacio Rodríguez Larreta odia a los niños, de otra manera no es viable comprender que el titular del Ejecutivo porteño destine mensualmente a cada niño a cargo de un trabajador estatal el equivalente a poco más de un kilo de yerba mate o a dos kilos de pan”, se quejaron los sindicatos mediante el documento difundido.
Además, recordaron que en este período, a la vez que se mantuvo frenado el valor de las asignaciones, algunos de los ingresos de la Ciudad de Buenos Aires, como impuestos y tasas, subieron de manera de desproporcionada. Como ejemplo remarcaron que “desde 2013 el costo del acarreo de vehículos por infracciones de tránsito se actualizó en un 750 por ciento y que el impuesto por alumbrado, barrido y limpieza (ABL) se ajusta de acuerdo a la inflación”.
En la audiencia, se expondrán estos argumentos, y otros que llevarán los expositores, y se buscará que se consensue una suba para intentar presionar al gobierno de Rodríguez Larreta que descongele el valor, ya que hasta ahora no hay señales de que esto suceda. En este sentido, cada gremio tendrá su postura.
Desde UTE, buscará que la suba tenga en cuenta la inflación toral. “Los docentes vamos a proponer que la suba sea acorde a ese indicador. En concreto, queremos que las asignaciones pasen de los 270 pesos actuales a unos 3 mil, más acorde a la situación del país” le adelantó a Gestión Sindical una fuente del sindicato de maestros porteño. Para UTE, “los recursos están”, por eso insistirán en esta suba.
En agosto pasado, el gobierno nacional dio un aumento del 12,2 por ciento en las Asignaciones Familiares según establece la Ley nacional, haciendo que el beneficio familiar a nivel nacional fuera casi 10 veces superior al que perciben los trabajadores dependientes del gobierno porteño.
Los cuestionamientos a la política laboral de la gestión de Rodríguez Larreta no son nuevas, y el año pasado tuvieron su epicentro luego de la muerte de la agente de tránsito Cinthia Choque, que generó reclamos por las condiciones de contratación y los salarios que paga el gobierno a muchos de sus trabajadores.
Esto se completa con el congelamiento de las asignaciones, que no tiene una explicación oficial hasta el momento. En enero, el gobierno porteño pasó 292 de los 1.793 agentes que eran monotributistas a planta transitoria, pero a 78 no les renovó el contrato. La mayoría se había plegado al pedido de justicia por Choque y Santiago Siciliano, que quedó gravemente herido en el incidente.
A fines de ese mes, la justicia ordenó volver a incorporar a los cesanteados, un revés para el jefe porteño. Ahora, por el tema de la asignación, en la Ciudad de Buenos Aires se puede dar el primer paro de actividades del año. Es que los gremios podría llamar a un cese de actividades el día de la audiencia. “Lo va a definir cada organización, la idea es apoyar la realización de la audiencia con un paro. ATE lo va a definir en plenario de delegados en cada sector, en los próximo días”, remarcó Sueiro.
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