«Es terrible trabajar de esa forma», denuncian ante los problemas con los aires en hospitales porteños
Desde el gremio plantearon que "se debe escuchar a los trabajadores médicos y profesionales de la salud“.
No se descartan medidas de fuerza esta semana, si no hay mejoras en la situación de la refrigeración de los quirófanos en el Durand y el Lagleyze.
Varios hospitales de la Ciudad de Buenos Aires denunciaron que tienen problemas con la refrigeración de quirófanos y de consultorio, lo que hizo que en plena ola de calor extremo se cancelaran operaciones y otras actividades. La denuncia de los trabajadores de la salud comenzó en el hospital Durand, y luego se extendieron a otros centros asistenciales públicos. Según afirmaron desde la Agrupación ATE Hospitales, en los últimos días por estas cuestiones se suspendieron 20 operaciones promedio, lo que marca la magnitud del problema.
«Es terrible trabajar en esas condiciones», afirmaron desde la entidad sindical, que reclamaron respuestas a las autoridades del Ministerio de Salud, y no descartan medidas de fuerza esta semana, si no hay mejoras en la situación.
Desde ATE Hospitales comenzaron a difundir que en varios centros asistenciales por la falta de refrigeración se trabajaba en «condiciones deplorables» y se comenzaron a suspender actividades, sobre todo cirugías.
Según el resumen de la entidad, la problemática está sucediendo en la mayoría de los hospitales, pero especialmente en el Hospital Durand y el Hospital Oftalmológico Lagleyze. En este último lugar, circularon fotos en redes sociales donde se veía que el termómetro marcaba 35° en uno de los quirófanos, por lo que se debieron suspender las actividades. Lo mismo pasó en otros centros de salud.
«Es terrible trabajar de esta forma», dijo Luis Ledesma, referente de ATE Hospitales en el hospital Ramos Mejía. En ese centro asistencial, explicó el dirigente en diálogo con Gestión Sindical, «la guardia está bastante colapsado, no funciona el aire acondicionado y es terrible trabajar de esa manera”.
«Le pedimos a las autoridades que tomen medidas porque a veces funcionan los equipos, a veces no, es fastidioso trabajar de esa manera con los calores que hacen», recalcó Ledesma. Además, «tenemos los servicios de clínica médica de planta baja y primer y segundo piso donde directamente el aire central no funciona, y el calor a la tarde, con el sol pegando de frente, es terrible».
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En el Ramos Mejía, agregó Ledesma, no hay problema en los quirófanos, ya que «funciona la refrigeración porque tiene refacciones relativamente nuevas y se cambiaron equipos y otros elementos. Nuestro problema a está vinculado a clínica médica y la guardia, sobre todo».
Héctor Ortiz, que se desempeña como enfermero en el Hospital Durand y es el principal referente de la entidad sindical, sostuvo que la cartera sanitaria «no hace nada» y se repiten los problemas porque «ni al ministro de Salud, Fernán Quirós, ni al jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta les interesa la salud pública».
ATE anunció que, de no tener respuestas sobre la renovación de los equipos, se movilizarán la semana que viene frente al Hospital Durand, sumando a todas las agrupaciones posibles.
Luego de estas denuncias se sumaron nuevas de otros centros asistenciales, en especial entre el sábado y domingo, donde se registraron temperaturas que superaron los registros históricos, que datan de la década del 60. «El que más sufre es el enfermo, el que está recién operado o internado grave; si no funciona el aire la sala es un horno», sostuvo Ortiz.
Conflictividad
Este nuevo elemento generó otro enfrentamiento entre las autoridades porteñas y los trabajadores de la salud, que tienen una larga historia de críticas y cuestionamientos respecto a las políticas que llevan adelante desde Bolívar 1.
Sobre los pedidos sobre el calor, a los pedidos de ATE se sumaron SUTECBA y UPCN, que habían reclamado en enero que debido al mal funcionamiento del equipo de aire acondicionado de los quirófanos central y de guardia del Lagleyze ya fue necesario suspender las cirugías pasibles de reprogramarse por “el riesgo a la integridad física del paciente y del personal”.
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