La CGT y una reunión que solo sirvió para convocar a otra reunión

Tras el encuentro de mesa chica, esperarán al 11 de abril, cuando se junta el Consejo Directivo, para decidir qué hacer. La CGT tiene claro que hay que entrar otra vez en acción; lo que se debate es cómo.

La CGT mantuvo el miércoles por la tarde una reunión de su mesa chica para definir los pasos a seguir en medio del ajuste libertario y con una situación crítica por donde se la mire. El encuentro terminó con Héctor Daer anunciando que la semana próxima definirán los pasos a seguir.

Fue el primer encuentro después de dos meses, en la sede de UPCN, y se llegó a una conclusión: se va a encarar un paro o movilización siempre y cuando haya consenso de todos los sectores nucleados en su consejo directivo.

En la central obrera, como contó Gestión Sindical, conviven diferentes miradas. Las más críticas, encabezadas por el moyanismo y aquellos sectores cercanos a Cristina Kirchner, quieren apretar el acelerador, ir a fondo, porque creen que La Libertad Avanza se puede consolidar frente a la inacción opositora e ir por más.

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En otras palabras, dentro de la CGT piensan que lo que se vio en estos casi cuatro meses de gestión de Javier Milei es apenas una muestra de lo que puede suceder en el futuro y que es indispensable llevar adelante acciones contundentes entra las cuales no se descarta un mega paro general como el que se dio el 24 de enero.

Algo hay que hacer, pero qué

El ala dialoguista, con Héctor Daer a la cabeza, comparte el diagnóstico: si la oposición no se mueve, Milei le va a ganar de mano. Pero también avisa que la medida que se resuelva debe tener el mayor consenso posible.

No lo dice abiertamente pero sabe que del lado de los independientes, con Andrés Rodríguez, Gerardo Martínez y José Luis Lingeri, sobrevuela la prudencia. Son aquellos que proponen «cuidar la herramienta del paro» para que no se agote. Y saben que Milei aún goza de cierto respaldo de su base electoral pero que al ritmo del ajuste se va a profundizar el desgaste de su imagen, en futuro que ven no muy lejano.

Por lo tanto, se patearon conclusiones para el 11 de abril, fecha en la que se va a reunir el consejo directivo. «No descartamos nada, ni paro ni movilización», lanzó el líder de Sanidad cuando terminó el encuentro.

Por el momento, la idea que tiene mayor impacto es realizar dos movilizaciones: una el 1º de mayo y otra el día que se debate la nueva Ley Bases, que contiene un capítulo especial dedicado a la reforma laboral.

Bajar el DNU sigue siendo lo urgente

Los dirigentes también van a entablar contacto con los gobernadores peronistas: son la llave no solo para frenar el mega proyecto de ley libertario sino también para dar de baja y de manera definitiva el DNU 70/2023 que contiene cambios de raíz en materia laboral.

Si bien el capítulo laboral del DNU fue declarado inconstitucional a partir de una presentación de la CGT, esa decisión judicial fue apelada por el Gobierno y depende de lo que resuelva la Corte Suprema.

Mientras tanto, continuarán los apoyos a las protestas sectoriales, como aquellas que protagonizan hoy en día los estatales, que ya sufrieron 15 mil despidos.

Daer y la agenda de la CGT

«No pueden ser tan mezquinos y egoístas de creer que si les ponen un impuesto a los trabajadores van a estar mejor. Va a generar más recesión, así que con el tema Ganancias no creo que se metan», advirtió el triunviro de la central Azopardo sobre el rol que juegan algunos mandatarios provinciales que si no hablan abiertamente de reinstaurar ese impuesto a los salarios es solo por el costo político.

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En este marco, el dirigente expresó que los gobernadores deben «defender a su pueblo» y los instó a «no dejarse subyugar por un Gobierno que lo único que hace es caja».

Daer añadió que en la agenda de la CGT también hay lugar para representantes pyme afectados por la recesión económica y reuniones con legisladores para «profundizar las garantías políticas en el Congreso» y derogar el DNU en la Cámara de Diputados «de una vez por todas».