Aerolíneas Argentinas: los gremios se fueron sin nada de la reunión y se esperan más medidas de fuerza
El conflicto que afecta a Aerolíneas Argentinas y otras líneas aéreas dejó al secretario de Transporte, Franco Mogetta, en el ojo de la tormenta.
Con sanciones, y sin acuerdo a la vista, el conflicto aeronáutico con Aerolíneas Argentinas todavía no se saldó y las partes recalculan estrategias. Hay sectores sindicales que apuntan fuertes críticas contra Franco Mogetta, el secretario de Transporte de la Nación, de quien dicen que «no entiende» lo que está sucediendo.
Para los dirigentes gremiales involucrados, el funcionario ha demostrado, en repetidas ocasiones, “su incompetencia para entender las complejidades del sector y las necesidades de recomposición salarial de los trabajadores aeronáuticos”.
Esto es lo que dice un comunicado surgido de manera conjunta desde la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) que conduce Pablo Biro, la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA) de Juan Pablo Brey, la Asociación del Personal Aeronáutico (APA) y la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA).
La infructuosa reunión con Aerolíneas Argentinas
En concreto, son los descuentos de días y hasta horas de trabajo al personal que adhirió a paros o asambleas convocados por los sindicatos, lo primero que traba la negociación, además de una propuesta salarial que consideraron «provocadora» por parte de Aerolíneas Argentinas.
Tal como se podía prever,más allá de versiones que decían que se podía llegar a una acuerdo esta semana, la reunión de este martes alejó posiciones en lugar de acercarlas.
Acerca de Mogetta, desde los gremios insistieron en que «su actitud negligente y su escasa disposición al diálogo están llevando al sector del Transporte a una crisis profunda, afectando no solo a los trabajadores, sino también a millones de usuarios. Resulta evidente que su nombramiento no se basó en la capacidad técnica ni en la experiencia requerida para el cargo, sino en criterios que poco tienen que ver con las necesidades del sector”.
Por lo cual, decidieron “profundizar el conflicto. Vamos a implementar medidas de fuerza más contundentes y elocuentes, que sirvan para que el Gobierno Nacional entienda la necesidad imperiosa de recomponer nuestros degradados salarios”.
La génesis del conflicto
El viernes pasado, por ejemplo, se tuvieron que reprogramar más de veinte vuelos que estuvieron demorados por las asambleas realizadas por APLA. Las máximas autoridades de dicho sindicato señalaron que las asambleas que se realizaron hasta el momento, no serán las últimas, sino que planean retomar estos días para poder lograr una esperada -y necesaria- mejora en el sueldo.
Por el lado de la empresa, se niegan rotundamente a darle una respuesta positiva a los empleados sobre la demanda y por el lado del gobierno insisten con multar y sancionar a los gremios aeronáuticos que tomen las medidas de fuerza.
En este marco, los empleados tercerizados de GPS-Aerolíneas Argentinas que vienen una situación aún peor, afrontando el despido de sus compañeros, se solidarizaron con sus pares de Intercargo y emitieron un comunicado.
“Desde la Comisión Interna de GPS expresamos nuestro apoyo incondicional a las medidas que están tomando los trabajadores enrolados en todos los sindicatos aeronáuticos a excepción de nuestro sindicato UPADEP qué a pesar de reunirse con el ministerio de la provincia de Buenos Aires, se mantiene alineado al gobierno nacional», dijeron.
«Desde la semana pasada APLA, AAA, UPSA, ATEPSA, APA entre los gremios más importantes del aérea, son parte de medidas escalonadas en reclamo de la recomposición salarial que lleva meses de retraso y que significa para muchos trabajadores efectivos estar por debajo de la canasta básica, por ejemplo, nuestros compañeros maleteros o del check in”, señalaron.
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