Ricardo Peidro, de la AAPM: «El Gobierno le está abriendo la puerta a los responsables de este desastre»

El referente de la CTA Autónoma marcó su disgusto con el rumbo del Ejecutivo, que considera que le da chances al macrismo en 2023.

En diálogo con Gestión Sindical, el secretario adjunto de la CTA Autónoma, Ricardo Peidro, criticó al Gobierno nacional y lo culpó de abrirle la puerta, de cara a las elecciones de 2023, «a los responsables de este desastre», en referencia al macrismo.

También aclaró que la postura de la central que integra «es muy clara, y no es de ahora». Y recordó que las críticas más fuertes a la conducción de Alberto Fernández comenzaron «cuando se firmó el acuerdo con el FMI, porque eso significó convalidar la estafa».

Para el también secretario general de la Asociación Agentes de Propaganda Médica (AAPM), el préstamo pedido al Fondo «fue para salvar al gobierno anterior, que arruinó a los sectores populares, y además significó condenar a los gobiernos venideros».

-¿Cuáles son las mayores críticas que le hacen al Gobierno?

-Lo primero es aclarar que nosotros no somos simples observadores, que critican y nada más. Cuando fue lo del acuerdo con el Fondo nosotros plantemos cuál era la manera en la que había que negociar para que no termine siendo un ajuste para los trabajadores. Era lo que temíamos y lo que finalmente pasó.

Y después el mayor problema es que los interlocutores del Gobierno son siempre los mismos: los grandes grupos económicos, financieros y el sector agrícola. Nunca hay diálogo con los representantes de los trabajadores, para tomar medidas que los favorezcan.

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Además, seguimos reclamando por el aumento de emergencia para trabajadores activos y jubilados, y por el Salario Universal, porque creemos que hay que recuperar el ingreso de todos los trabajadores, no solo de quienes están registrados.

-Sobre este punto recientemente fue crítico de la CGT, al decir que no representa a todos los trabajadores.

-Ellos solo se ocupan de quienes están registrados, por eso decimos que necesitamos un nuevo modelo sindical. La clase trabajadora fue atomizada y cambió su composición. Hay cada vez más trabajadores en empleos informales o formando cooperativas.

Nosotros por supuesto que apuntamos a que todo el empleo sea formal, pero mientras llegamos a eso hay que representar a toda la clase. Porque hablan de que hubo un crecimiento del empleo pero lo que no dicen es que más del 40% está precarizado.

-¿Cómo ve las elecciones de 2023?

-Nosotros con los paros que hicimos y con las manifestaciones en las calles logramos derrotar al macrismo.  Ahí fue donde perdió el gobierno anterior. Y eso después se reflejó en las urnas. Pero lamentablemente creo que ahora hay un contexto que abre la posibilidad de que los responsables de este desastre vuelvan las instituciones.

Por eso es imperioso que se realice una convocatoria amplia, que incluya a todos los sectores que forman parte del Frente de Todos.

-¿Cristina Kirchner le parece una buena candidata presidencial?

-Cristina indudablemente siempre está en el centro del tablero político. Y mucho más luego del intento de asesinato que sufrió. Pero en nuestro país todo es muy dinámico, y en el tiempo que falta para las elecciones puede pasar cualquier cosa. Creo que lo que ocurra en los últimos meses será lo más decisivo.

-¿Es posible que su central vuelva a fusionarse con la CTA de los Trabajadores o las diferencias siguen muy fuertes?

-Nosotros, si tomamos en cuenta el crecimiento que tuvimos en organizaciones sindicales y territoriales, somos la segunda central en representación. Los números son claros en esto. Y el tema de la unidad no es algo que nos quite el sueño. Pero el tiempo dirá.

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Lo que sí es importante es que en el trazo grueso estemos juntos, como viene sucediendo. Que recorramos el mismo camino cuando se trata de defender los derechos de los trabajadores.

-¿Cuál es hoy en día la situación de los visitadores médicos?

El mayor problema que tenemos hoy en día es que no hay voluntad política para que se ejerza un control sobre la industria farmacéutica. Entonces pasan cosas como que las multinacionales extranjeras ponen a los trabajadores en categorías a las que no pertenecen, para pagarles menos salario.

Y también hay laboratorios nacionales que extorsionan a sus empleados, incluso ofreciéndoles sueldos más altos, para que no se afilien. Y de esa forma terminan perdiendo derechos.

En esto no hay dudas de que para la industria farmacéutica el mejor sindicato es el que no existe. Pero nosotros creemos que el futuro del trabajo es con derechos, por eso no dejaremos de luchar para cambiar esta realidad.