Reforma sindical: el fracaso de Tetaz en el Congreso y el acuerdo de Milei con la «casta» de la CGT
Nuevo fracaso para Tetaz: no habrá sesión especial para tratar la reforma sindical
El diputado radical no tuvo quorum para tratar la reforma sindical en el Congreso. La Libertad Avanza le escamoteó todo apoyo.
El diputado radical Martín Tetaz sumó un nuevo fracaso. Este martes había pedido una sesión especial para debatir mañana su proyecto de reforma sindical, pero no obtuvo quórum porque el dictamen no fue reconocido por la mayoría de los bloques opositores y tampoco tuvo el respaldo del bloque de La Libertad Avanza.
La semana pasada el legislador que impulsa la reforma del modelo gremial de nuestro país había adelantado que interpondría un recurso legal para insistir con el tratamiento de la propuesta, luego que fracasara por tercera vez su intento de firmar un dictamen de mayoría en la comisión de Legislación Laboral que él preside.
Todo se suscitó a partir de que el proyecto no lograra las firmas necesarias que establece el reglamento: de la reunión de la Comisión de Legislación del Trabajo participaron 31 integrantes, y sólo 15 firmaron ese despacho, mientras que el presidente del bloque de Encuentro Federal, Miguel Pichetto, se opuso a poner su rúbrica.
Luego de eso, Tetaz decidió enviar una carta al presidente de la Cámara de Diputados, Martin Menem, para pedir que se incluyera en la sesión ese expediente, a fin de determinar su validez, pero como eso no ocurrió solicitó la sesión especial.
Sin quorum
“Si interpretamos de manera literal y aislada del reglamento una resolución de abril del 2010, una mayoría puede bloquear completamente el funcionamiento de una comisión, convirtiendo en una pantomima las reuniones y debates que allí ocurran, al bloquear un dictamen, sin construir otro dictamen alternativo», argumentó Tetaz para reclamar un tratamiento que finalmente no consiguió.
En la sesión especial hubo 111 diputados presentes, 18 menos que los 129 necesarios para habilitar el tratamiento en el recinto.
De esta manera, y tal como ya adelantara que lo iba a hacer, ahora a Tetaz sólo le queda apostar a concretar su anhelada reforma sindical en 2025.
«Si no tuviéramos éxito con este planteo que le vamos a hacer a la presidencia de la Cámara habrá que insistir el año que viene», había señalado.
Reforma sindical: los puntos más polémicos
El proyecto implica el desfinanciamiento de las organizaciones gremiales al limitar los aportes sindicales y la intromisión en las elecciones internas de dirigentes que hacen los propios trabajadores, al legislar sobre quiénes pueden ser elegidos y quiénes no.
De esa forma pondría en riesgo el único acuerdo al que, se supone, habría llegado el Gobierno nacional con la CGT, ya que desde la Casa Rosada habían prometido que no avanzarían en el tema, algo que quedó en claro con el accionar de los diputados de La Libertad Avanza en el Congreso de la Nación.
La iniciativa de la UCR contiene medidas que complementan los cambios en materia laboral que ya cobraron vigencia a partir de la reglamentación de la ley Bases, como la extensión del período de prueba a un rango de entre 6 y 12 meses.
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Otros puntos que ya rigen son la eliminación de multas por no registración laboral, legalización del despido por razones de discriminación (doble indemnización), fondo de cese por desempleo optativo, y régimen de trabajadores independientes con hasta tres colaboradores.
A todo eso se les sumarían, si finalmente el radicalismo tuviera éxito con su propuesta, otras cuestiones muy rechazadas por el sindicalismo, como la limitación a las reelecciones a los secretarios generales y la eliminación de la obligatoriedad de las cuotas solidarias sindicales, cortando una de las principales arterias del financiamiento de las estructuras gremiales.
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