Reabrir paritarias o bono de fin de año, el dilema de los gremios rosarinos
Por un lado, algunos sectores solicitan la urgente reapertura de la negociación salarial, mientras que por otra parte, ciertos sindicatos buscan cerrar un adicional que sirva como paliativo ante la pérdida de poder adquisitivo de este año.
Los gremios luchan por la recuperación del poder adquisitivo de los trabajadores siguiendo dos estrategias diferentes. Por un lado, algunos sectores solicitan la urgente reapertura de la negociación paritaria, mientras que por otra parte, ciertos sindicatos buscan cerrar un bono de fin de año para que el salario cierre el 2016 con algo menos del deterioro actual, por más que en el gobierno se empeñen en minimizar el impacto de la inflación. El bolsillo dice otra cosa, como siempre, y nunca le llevó el apunte a los relatos oficiales.
Los trabajadores estatales (ATE Rosario y Siprus) y docentes de escuelas públicas y privadas (Amsafé y Sadop) realizan este miércoles una nueva medida de fuerza en reclamo de la reapertura de la negociación paritaria. En la misma sintonía, el Movimiento Sindical Rosarino expresó su total rechazo al pago de un “Bono de fin de año” y le exigió al gobierno nacional una nueva discusión sobre el salario de los argentinos.
Desde el movimiento que nuclea al sindicato Luz y Fuerza, trabajadores Municipales de Rosario, La Bancaria, Asociación Empleados de Comercio, SMATA, UOM, entre otros; afirmaron que el otorgamiento de un bono «no resuelve las economías de los hogares de los trabajadores y resulta una ‘solución’ menor frente a un proceso económico que a lo largo de los últimos diez meses ha golpeado de manera contundente el bolsillo de los asalariados”.
“Creemos que dicho bono tampoco resolvería la tensión social generada por los aumentos de tarifas, devaluación, inflación y despidos producidos en los últimos meses”, agregaron desde el MSR.
En tanto, la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) vio con buenos ojos la propuesta nacional de acordar un bono de fin de año pero rechazó los anuncios del gobernador santafesino sobre la falta de dinero para el pago de dicha retribución. El secretario general de la delegación Santa Fe, Jorge Molina, advirtió que «va a haber protestas y reclamos» en caso de que se establezca a nivel nacional un bono de fin de año para los trabajadores y el gobierno provincial no acompañe esa medida, tal como sugirió Miguel Lifschitz.
Además, Molina consideró que el bono debe ser de 5 mil pesos, cifra equivalente a la mitad de un sueldo mínimo del estado santafesino.
El sindicalista señaló que el bono figura en la agenda de la CGT a nivel nacional en sus conversaciones con el gobierno, al igual que «el incremento de los planes de asistencia para el sector informal, el aumento de la jubilación mínima, la modificación del Impuesto a las Ganancias, empezando por el aguinaldo y la modificación de escalas para el año que viene».
En declaraciones a radio Sol, de Santa Fe, Molina dijo que si se establece el bono «tiene que ser acatado y cumplido por todas las jurisdicciones de la Nación, en este caso de la provincia de Santa Fe».
En la misma vereda que el dirigente de UPCN, el secretario de Finanzas de la CGT, Abel Frutos, sostuvo que el bono de fin de año que la central obrera exigió a representantes del gobierno debe ser «universal para privados y estatales y que contemple a los jubilados y a los que perciben asignaciones sociales». La semana pasada habían advertido: «Si no hay respuestas, vamos al paro».
El dirigente cegetista recordó además que «el triunvirato está facultado por el Confederal del 23 de septiembre pasado a fijar la fecha de una jornada de protesta y su modalidad, si las respuestas del gobierno son insuficientes».
Frutos puntualizó que «la exención del medio aguinaldo de ganancias, un bono de fin de año universal para privados y estatales y que contemple a los jubilados y a los que perciben asignaciones sociales, son los reclamos que efectuó la CGT».
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