Peretta, duro contra la CGT: dijo que «no mueve el amperímetro» y que su marcha «fue un fracaso»
El referente de «los flacos» del nuevo sindicalismo señaló que la central «no se movilizó en tres años y, cuando lo hace, no están claras las consignas».
El líder de la Confederación de Trabajadores y Empleadores (CTE), Marcelo Peretta, quien es el referente de los «los flacos» del nuevo sindicalismo, volvió a cargar muy duro contra la CGT, al afirmar que «no mueve el amperímetro» y que su marcha del miércoles «fue un fracaso».
En ese sentido, y en diálogo con Gestión Sindical, apuntó que la central obrera «no se movilizó en tres años y, cuando lo hace, no están claras las consignas».
El también secretario general del Sindicato de Farmacéuticos y Bioquímicos (Safyb) señaló que «lo poco claro que quedó en algunos sindicatos fue todo lo opuesto a lo que querían los trabajadores, porque salieron a apoyar a Alberto Fernández. A decir que los responsables de la inflación son los empresarios».
Y sobre ese punto no dudó en afirmar que «está claro que el responsable del aumento de la inflación es el Gobierno, porque emite dinero sin respaldo».
Peretta y el pedido de «una nueva CGT»
Además, marcó la paradoja de que desde la CGT y lo que llama «los sindicatos ´gordos´” le piden al Gobierno “más subsidios y más bonos, que son los causantes de la inflación».
Por eso advirtió que «las contradicciones del sindicalismo son enormes». Y se preguntó: «¿Cuánta plata gastó la CGT, y los sindicatos ´gordos´, los poderosos, para movilizarse para nada? Porque está claro que ninguna mejora va a ocurrir a partir de la movilización de la CGT».
En ese contexto fue que planteó que «antes, hace décadas, cuando la CGT movilizaba se conseguías cosas. Hoy no mueve el amperímetro».
Y remarcó que «por eso estamos reclamando una nueva CGT, donde estemos los sindicatos chicos, los que verdaderamente podemos hacer que eso funcione como una confederación, atendiendo las necesidades de los trabajadores».
En contraposición, definió a la central obrera como «una corporación, que atiende las necesidades de los sindicalistas que funcionan como empresarios. Porque hay que decir la verdad, y es que (sus dirigentes) piensan como empresarios y tienen empresas asociadas a sus sindicatos».
Justamente por eso, señaló, «es que nosotros los combatimos. Y con tristeza vemos que mientras el sindicalismo decrece en prestigio, las organizaciones sociales crecen en número de afiliados y en número de pobres».
En esa línea, Peretta también apuntó contra los grupos piqueteros, que «han tomado las banderas del sindicalismo y también las calles. Y piden por los derechos de quienes ellos dicen que son trabajadores, aunque no lo son. Pero las banderas las toman».
Luego, en una suerte de revisionismo histórico, recordó que fue «(Juan Domingo) Perón quien les dio a los sindicatos, que en ese momento estaban en manos de la izquierda, la fortaleza que necesitaban».
Una central obrera que «solo tiene discurso»
En ese sentido culpó a la CGT de lo que sucede actualmente: «Ahora, 80 años después, les devuelven el poder a los sindicatos de izquierda».
Por último, remarcó nuevamente que en la calle Azopardo «solo tienen discurso, y no van a lograr ningún beneficio para los trabajadores». Y concluyó que «ellos van por la fábrica de pobres, por convertir a la Argentina en una gran villa miseria».
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Estas nuevas declaraciones de Peretta están en sintonía con lo que siempre expresa de que su CTE representa a los «los ‘flacos’ del sindicalismo», que son los que quieren «modernizar los convenios colectivos de trabajo. Buscamos volver a la cultura del trabajo y derrotar al pobrismo».
Para eso, como suele explicar, la receta es apostar al «esfuerzo, volver a levantarse temprano, lograr un trabajo registrado y una movilidad social ascendente». Porque, asegura, «es falso que la única alternativa de un ciudadano sea vivir de un plan».
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