Nuevos despidos en Acindar: la UOM dijo basta y paralizó por completo la producción

El foco del conflicto se da en la filial de Villa Constitución. El gremio también denunció malas condiciones laborales y medidas extorsivas.

Tras una nueva ola de despidos masivos en la planta de Acindar, la UOM de Villa Constitución decidió activar medidas de fuerza, paralizando por completo la producción en la acería. Además, desde el gremio denunciaron medidas extorsivas y malas condiciones laborales.

El conflicto se desató luego de las suspensiones que se dispusieron contra los trabajadores que participaron de asambleas, y que en unos 70 casos se tradujeron en despidos por acumulación de medidas disciplinarias del mismo tenor. 

Asimismo, la organización sindical señaló que la empresa planteó en la última reunión paritaria -que no registró ningún avance en las negociaciones- un recorte significativo de costos, además de exigir modificaciones en las condiciones laborales que impactan directamente a los trabajadores. 

Las amenazas de Acindar a sus trabajadores

La semana pasada Acindar envió notificaciones de suspensiones sin goce de haberes por 16 días, las cuales empiezan este lunes y se extienden hasta el miércoles 29. 

“Ante la baja en la baja producción que están teniendo, se agarraron de una asamblea que se había hecho en diciembre” para activar las suspensiones y despidos, explicaron desde la UOM de Villa Constitución. Y agregaron: «Las sanciones son colectivas, por lo que en este momento está paralizada la acería. Esto ya se veía venir, con sueldos debajo de la línea de la pobreza. Se aceleró porque Acindar está despidiendo a 70 personas».

En los telegramas que la empresa envió a sus empleados se dejó una clara advertencia. «Intimamos por la presente que cese este tipo de conductas, que provocan trastornos operativos a la empresa con consecuencias económicas», dice el texto, en el cual se adelanta que de participar “en otra situación gremial” se lo va a despedir con causa.

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Acindar también busca modificar las metodologías de trabajo; reducir los tiempos muertos; ajustar los planteles laborales; cambiar el régimen de turnos y feriados; y que las suspensiones sean con porcentajes salariales inferiores a los acordados en años anteriores. Estas medidas, justificadas por la empresa bajo la necesidad de «ser más competitivos», han sido rechazadas categóricamente por la UOM.

“La empresa busca avanzar en medidas que no sólo perjudican a los trabajadores, sino que también atentan contra la estabilidad y la dignidad laboral. Desde la organización gremial planteamos que no se puede discutir ninguna de estas condiciones sin antes resolver la aplicación de la paritaria”, destacó la Comisión Directiva de la filial de Villa Constitución.

La paritaria: otro punto de tensión

En el mismo comunicado, el gremio adelantó que, de no alcanzarse un acuerdo en la reunión programada con la empresa para este mismo lunes, se llevará a cabo un cese total de actividades. Y se dejó en claro el malestar generado por la aplicación de las medidas disciplinarias y los despidos consecuentes.

A esta situación hay que agregarle que todo ya venía muy tenso por la dilatada negociación salarial. En una junta de delegados celebrada recientemente, la UOM había informado sobre el rechazo de la Cámara Argentina del Acero a establecer un aumento que contemple la inflación medida por el INDEC. 

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También se discutió la reunión mantenida con el Ministerio de Trabajo de la provincia, donde el titular de la cartera laboral propuso la licitación de algunas obras públicas como medida paliativa. 

Sin embargo, esta solución, según advirtió el gremio, no será suficiente para revertir la delicada situación que atraviesa la industria siderúrgica este año.