Mercedes-Benz vendió su planta en La Matanza y Pignanelli asegura que no va a haber despidos

El grupo comprador tiene una muy buena relación con SMATA. Los empleados de Mercedes-Benz igual expresan preocupación por su futuro.

Con la confirmación de que Mercedes-Benz venderá su planta de la localidad de Virrey del Pino, partido de La Matanza, desde SMATA aseguraron rápidamente que los puestos de trabajo están asegurados. Sin embargo, ante la falta de precisiones, los empleados temen por su futuro.

Un dato no menor es que el grupo empresario que comprará la planta que la multinacional alemana tiene en la provincia de Buenos Aires tiene una muy buena relación con el sindicato.

“Gracias a Dios tengo cubiertos a los 1.800 compañeros”, aseguró el titular de SMATA, Ricardo Pignanelli. Y su tranquilidad radica en que hay un compromiso de fuertes inversiones por parte del Grupo Prestige, que es quien ejecutará la compra. 

“Mercedes-Benz no se va del país”

En ese sentido hasta se aseguró que “Mercedes no se va (del país). Se asocia y hay un plan de fuerte inversión”. Y se adelantó que los detalles se darán a conocer el próximo mes, una vez formalizada la operación de cambio de dueños.

Dentro del grupo empresario estaría el ex Presidente de Toyota Argentina, Daniel Herrero, quién además de aportar su conocimiento de la industria automotriz tiene una relación más que fluida con el gremio que conduce Pignanelli.

La noticia de la venta, algo que ya se venía rumoreando desde hace bastante tiempo, fue confirmada desde Mercedes-Benz directamente a SMATA. De esta manera, y después de 70 años, la marca alemana deja las operaciones en el país en manos del mencionado grupo empresario.

Casi 3.000 despidos de trabajadores petroleros podrían generar una crisis inédita en Santa Cruz

Desde 2021, Mercedes-Benz se dividió en dos empresas independientes a nivel mundial. Una, conformada por la producción del utilitario Sprinter y la comercialización de vehículos premium y, la otra, dedicada a la fabricación de camiones y autobuses.

La noticia en cuestión está centrada en la primera de estas empresas, mientras la de vehículos pesados continuará fabricando en la Argentina en la nueva planta que está construyendo en Zárate.

En tanto, otra información que confirma la venta tiene que ver con la comunicación que los delegados de SMATA le hicieron, la semana pasada, a los 1.800 empleados de la planta.

Dudas y enojos entre los empleados

Los gremialistas explicaron que el 25 de febrero se oficializará el traspaso, más allá de que la concreción del cambio de manos lleve un tiempo mayor.

Durante una reunión con los trabajadores de Mercedes-Benz, los representantes del gremio mecánico dieron detalles sobre cómo será el futuro de la compañía, aunque no pudieron disipar la preocupación de una parte importante de los trabajadores.

Aguiar y el «escudo» que trajo de su reunión con el Papa Francisco en el Vaticano

Se explicó que una vez anunciada la venta, se creará una nueva empresa y los trabajadores deberán firmar el traspaso, manteniendo las mismas condiciones laborales que tienen hoy con la automotriz, en cuanto a antigüedad, categorías y convenio colectivo.

Quienes están de acuerdo con que eso suceda así, porque tienen interés en continuar trabajando normalmente, ya hicieron notar su inquietud y temor de que, más allá de lo expresado desde SMATA, finalmente la realidad sea otra y terminen desocupados.

Por otra parte, una buena parte del personal esperaba algún tipo de resarcimiento o plan de retiro, teniendo en cuenta que hay empleados con más de 20 años de la compañía de origen alemán. Sin embargo, según lo comunicado por los delegados, no habría ninguna opción de este tipo, al menos en una primera etapa.