«Gordos» coinciden con moyanistas en la necesidad de marchar contra los formadores de precios
Las dos corrientes de la CGT cargaron contra las grandes empresas, a quienes responsabilizan de la inflación y no descartan movilizarse.
Varios referentes de la CGT salieron a ratificar que no habrá un paro de actividades contra el Gobierno, pese a la preocupación por el deterioro de la situación económica y social. Tanto los «gordos» como los moyanistas coinciden que el problema es la suba indiscriminada de precios, y apuntan a medidas contra los grandes formadores.
«Una medida de fuerza de un paro no tiene ningún sentido», declaró el Secretario de Prensa y Comunicación de la central obrera, Jorge Sola, manteniendo el alineamiento de la conducción cegetista con el presidente Alberto Fernández.
En el caso de hacerse tendría que ser «contra aquellos que son los formadores de precio en el sentido especulativo», agregó. De esa forma buscan quitarle responsabilidad al Gobierno sobre la fuerte suba de precios que se desató este año.
En declaraciones radiales, Sola afirmó que su opinión es la misma que la mayoría de los compañeros integrantes del Consejo Directivo. Las repreguntas que hace la cúpula gremial intenta instalar la discusión de la política de baja de precios de los alimentos en el país, tema que según el integrante de la CGT «les preocupa a todos».
En cuanto al rol del Estado, Sola lo describió como no incidente y con pocas «herramientas para que funcione el sistema de precios». A lo que agregó que se está viendo «nada más que una parte de la problemática y quedan un montón de otras cosas por fuera».
A la hora de hacer una propuesta, el representante gremial aseguró que el camino es un «consenso muy grande», de tal forma que «esa responsabilidad social empresaria empiece a mirar al país desde una integralidad y no desde su propio ombligo». Aunque mencionó que «es un camino largo» y «no va a suceder ni siquiera el año que viene».
Responsabilidad política
Sin embargo, corrió el foco en el Estado y puso la responsabilidad en la política: «El movimiento obrero ha perdido ese lugar en la mesa de decisiones de la política toda». Por otro lado, comparó que «todos están pensando en quien va a ser el próximo candidato, las prioridades están por encima de lo importante».
Además, agregó que hoy ve como «un montón de candidatos son formados a gusto y placer de las redes sociales». «Después terminan siendo presidenciables, lo cual me parece una locura», alertó.
DAER DESCARTÓ UN PARO DE LA CGT PERO HABLÓ DE «EXTERIORIZAR» EL PROBLEMA DE LA INFLACIÓN
«Debemos ser creativos y propositivos», fueron palabras mencionadas varias veces por el dirigente. «Además de reclamar queremos estar sentados en esos lugares» donde se toman las decisiones, agregó.
Sola insistió que en cada mesa paritaria y reuniones con el Ministerio de Economía, la CGT deja en claro sus preocupaciones por los elevados números inflacionarios y los altos precios de los alimentos a causa de sectores de la economía cada vez más concentrados. Por último, mencionó que hoy en día hay «sobredosis de diagnósticos», pero lo que falta es «empezar a transitar los caminos».
Moyanismo
En tanto, el secretario general de Canillitas, Omar Plaini, se mostró a favor de la convocatoria que sugirió en los últimos meses Pablo Moyano, para manifestarse contra los capitales concentrados de nuestro país.
El dirigente pidió estar activo con los formadores de precios: «Esos sectores concentrados de la economía argentina son los que dificultan cualquier clase de gobierno». En ese sentido, Plaini consideró importante retomar la discusión por Vicentín ya que «no alcanza con un Estado articulador, porque te imponen el poder los formadores de precios y los que manejan las exportaciones e importaciones, y en ese sentido, Vicentín es clave».
«Lo que planteó Pablo (Moyano) lo venimos hablando hace muchísimo tiempo y creo que llegó el momento que el movimiento sindical argentino se exprese con total contundencia», sentenció el gremialista.
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