Colectivos del AMBA con servicio de emergencia: «No es un lockout ni un paro», dicen las empresas
Reclamo de las empresas de colectivos por lo que consideran un fuerte retraso en el cálculo de los subsidios.
Las cámaras empresarias hablan de deudas y atraso tarifario en los colectivos y anunciaron interrupciones de servicios. La respuesta del gobierno bonaerense.
A días del cambio de gestión en la Casa Rosada, con plena transición en marcha, hay un conflicto que se mantiene candente, sin solución en el corto plazo: los subsidios al transporte público. En los últimos días, la consecuencia se vio en los servicios de colectivos en el AMBA.
El panorama no es nuevo: cámaras empresarias que piden cada vez más fondos, reclamos con interrupciones del servicio incluidas, y un gobierno en retirada que dice que las cuentas están en orden. Mientras tanto, Javier Milei mira la película desde afuera sin dar señales sobre qué piensa hacer.
El alerta por el tema la brindó hace escasos días un grupo de empresarios del rubro automotor del transporte urbano de pasajeros, que directamente planteó que el servicio se está deteriorando y que pueden existir un cambio de frecuencias de colectivos en el corto plazo, algo que ya se vio esta semana en el AMBA.
Qué dice la Cámara sobre los colectivos
Según manifestó José Troilo, presidente de la Cámara Empresaria del Autotransporte de Pasajeros (CEAP), lo que están haciendo «no es un paro o un lockout”. “Estamos anunciando la dificultad que están teniendo las empresas a las que lamentablemente se les van agotando los recursos», explicó el representante patronal.
Esta situación, de acuerdo a fuentes empresariales, se debe a una “inédita” combinación de factores que explican el “deterioro en los servicios que se observa en estos meses”.
Principalmente hacen hincapié en «una inflación descontrolada», la mayor en tres décadas, y, a la vez, tarifas que por distintos motivos estuvieron congeladas.
Por otro lado, afirman que las compensaciones tarifarias (subsidios), que deberían cubrir la diferencia entre los valores abonados por los pasajeros y el costo real de la actividad, se realizan en base a cálculos que no se ajustan a la realidad.
Las compañías tiraron números: dicen que la actualización de precios de la estructura de costos de agosto y septiembre que hizo el Gobierno mantiene un atraso del 30%.
En este marco, expresaron: “Somos un sector que destina más del 80% de sus ingresos a pagar salarios, comprar gasoil y repuestos indispensables para operar. Repuestos que, además de ser cada vez más inaccesibles por los desfasajes entre los ingresos reconocidos por el regulador y los precios reales del mercado, son cada vez más difíciles de adquirir por el creciente desabastecimiento”.
“Advertimos a la población del inminente impacto de esta situación, y las consecuencias que esto puede traer para millones de personas”, señalaron. Por eso, se empezaron a observar reducciones de frecuencia y mala calidad de servicio, algo de lo que se hicieron eco miles de usuarios en el AMBA en los últimos días.
Respuesta del Gobierno bonaerense
Por el momento, Javier Milei no propuso una hoja concreta. Solo habló de «asistencia a los caídos» por parte de su cartera de Capital Humano e hizo algún cálculo sin demasiado sustento acerca de lo que podría costar el boleto de colectivo sin subsidio y sin impuestos, como él propone, previendo que triplicaría el valor actual. Claro que se basó en números que ahora la Cámara empresaria afirma que están subvaluados.
Quien sí se refirió al tema del reclamo de los transportistas fue el ministro de Transporte de la Provincia de Buenos Aires, Jorge D’Onofrio, reconoció un atraso en los pagos pero al mismo tiempo sostuvo que se normalizaron los fondos para evitar cualquier tipo de problemas en el servicio de transporte público.
“Tuvimos un atraso de ocho días en el pago de compensaciones. Son algo más de 8.000 millones de pesos. Ayer estaba listo para pagar y hubo dificultades con las transferencias, pero hoy ya se está transfiriendo”, lanzó el funcionario.
El ministro además precisó que el gobierno destina 41.000 millones de pesos por mes para líneas municipales y provinciales del AMBA, y otro tanto para las del interior de la provincia.
Por su parte, desde el Ministerio de Transporte de la Nación aseguraron en un comunicado que están «al día» con los fondos enviados a las empresas de colectivos del AMBA “en relación con los atributos sociales y el boleto integrado, que es lo que le corresponde puntualmente a Nación”.
“El reclamo de la deuda por parte de las empresas no está dirigido al ministerio de Transporte, organismo que ya depositó a lo largo del año más de 17.000 millones de pesos”, aclararon.
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