Home office: cada vez más argentinos lo eligen, pero muchos lo hacen para llegar a fin de mes
Especialmente los jóvenes priorizan el home office. Si en algún momento la elección era por la posibilidad de trabajar desde cualquier parte, ahora también pesa el pluriempleo por necesidad.
En la actualidad, los modelos de trabajo remoto e incluso híbridos son muy buscados en especial por los jóvenes, con dos focos marcados. Por un lado están aquellos que aspiran a poder trabajar desde cualquier lugar del país o del mundo. Por otro, los que buscan -y necesitan- el home office para tener varios empleos a la vez y así llegar a fin de mes.
La tendencia fue en aumento, sobre todo en los últimos años que la situación económica de la Argentina fue cayendo y los sueldos que las empresas ofrecen no son los mejores. Por este motivo son varias las personas que se ven obligadas a contar con más de un empleo.
Esto es lo que se llama nomadismo digital, que refiere a la capacidad de trabajar de forma remota y aplicar la tecnología para desempeñar tareas laborales desde cualquier ubicación geográfica.
Y aquí aparece el otro aspecto a destacar, en especial para quienes están en situaciones más desahogadas: un estilo de vida que ofrece a los colaboradores la libertad de viajar y vivir en diferentes lugares, sin comprometer su rendimiento laboral.
En cualquier caso, se le da importancia a disponer de los tiempos, ahorrar horas de viaje y asumir diversas responsabilidades.
Quiénes apuestan al home office
Según un informe elaborado por WeWork, una empresa de espacios de coworking (lugares armados especialmente para ir a trabajar de manera remota) y la consultora internacional Michael Page, ‘Retos y perspectivas del trabajo: revelando las claves de la evolución laboral’, el 72% de los argentinos encuestados sostuvo que les interesa la posibilidad ser nómada digital.
Ante la pregunta de cómo este modelo de trabajo impacta positivamente en la productividad, fueron los más jóvenes quienes respondieron de manera más favorable. El 86% de los centennials (jóvenes de entre 15 y 30 años) dieron una respuesta positiva. Entre los millennials (una década más atrás), el porcentaje fue del 80% y bajó al 77% 3 en la Generación X (más cerca del rango de los 50/55 años).
Asimismo, según un estudio de MBO Partners, la satisfacción de los nómadas digitales con su trabajo es del 85%, y con su remuneración es del 79%. Esto se debe, especulan, a que este tipo de modalidad les permite poder generar un equilibrio entre su vida laboral y personal.
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Incluso, ante la creciente expansión de esta tendencia, en Argentina, el Gobierno creó una residencia transitoria especial para atraer extranjeros, con una vigencia de 180 días.
El programa, denominado “Digital NomadPass”, ofrecía una tarjeta de regalo de hasta USD 500 para experiencias turísticas de profesionales del exterior, con el fin de promover que los nómadas digitales trabajasen en el país.
Nómadas digitales: beneficios y desventajas
Trabajar de manera remota tiene sus ventajas, no solo para los empleados sino también para la empresa. Es que, además del ahorro en viáticos, también ayuda a reducir los gastos en las oficinas como por ejemplo en servicios como la luz y el agua.
Y, si se siguen ciertas pautas de organización, es posible optimizar el tiempo y reducir el estrés que implica movilizarse todos los días.
Sin embargo, también hay un punto negativo. Una mala organización de los trabajos desde casa y el no poner los límites desde el principio puede provocar desventajas para ambas partes. Es que, haciendo home office siempre se corre el riesgo de trabajar más de lo habitual o al revés, es muy fácil disminuir la productividad por las distracciones que se puedan tener en el hogar.
Otro aspecto negativo es que a través del home office se pierde el contacto cara a cara con los compañeros de equipo, y para muchas personas los vínculos laborales son un factor clave para rendir en el trabajo.
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