La CGT y la CTA crearon un índice de inflación propio para negociar paritarias: calcularon un 44,1% anual

Fue con un acto en la UMET y se trata de la primera iniciativa de este tipo por parte de los trabajadores. Explicaron que el aumento del costo de vida fue principalmente por la suba del precio de alimentos, bebidas y de las tarifas.

El nuevo índice de inflación del Indec no es suficiente para los sindicatos. Unos 45 gremios de la Central General del Trabajo (CGT) y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) respaldaron en un acto en la ciudad de Buenos Aires la publicación del primer índice de inflación propio, creado por el Instituto Argentino de los Trabajadores.

Este centro creado por la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) e investigadores del Conicet toma una canasta básica distinta a la del Indec, y calculó una inflación interanual del 44,2% entre mayo de 2015 y el mismo periodo de este año.

Hugo Yasky (CTERA), Roberto Baradel (Suteba), Rodolfo Daer (Alimentación), Gerardo Martínez (UOCRA) y Víctor Santamaría (SUTERH) fueron algunos de los líderes sindicales que con su firma dieron el visto bueno a este cálculo, que utilizarán estos gremios para negociar las paritarias con las empresas y el Gobierno.

«Para discutir salarios teníamos que ir con números prestados, ahora vamos a ir con nuestra canasta. Estamos saldando este capítulo pendiente», aseguró Daer. Y agregó: «Este es un Gobierno de los herederos, todos tienen familias con recursos».

El representante de los trabajadores registrados en Alimentación no fue el único que le pegó al Ejecutivo. «Enfrentamos un Gobierno que como nunca es la clase dominante», dijo Yasky. Con todo, agregó que «este índice es una herramienta de lucha».

Si bien durante el acto en la Universidad dejaron en claro que no quieren competir con el Indec, defendieron el índice como su «propia moneda» para analizar las estadísticas. «Va más allá de usar el índice para negociar paritarias. Es una mirada macro de la Argentina», dijo Héctor Recalde.

El índice en foco
Según el Instituto, la suba de precios en el último año fue motorizada ante todo por el incremento en alimentos y bebidas (27,8%), vivienda y sus servicios (19,7%) y transporte y comunicaciones, en un 16,9% interanual.

El impacto fue diferenciado según el nivel de ingresos ya que, por ejemplo, el análisis presentado sostuvo que la suba en los servicios públicos impacta con más fuerza en el 10% de los trabajadores de menores ingresos. «La asimetría de la inflación según los ingresos se generó en los últimos meses, y fue creciendo desde febrero hasta hoy», completó el informe.

¿Qué más se calculó con este índice? Según una elaboración propia en base a estadísticas oficiales, el aumento promedio de las tarifas de electricidad fue de un 206,2%, mientras que las tarifas de gas aumentaron un 204,8 por ciento. En el transporte público, el aumento promedio calculado fue del 76 por ciento.

Entre noviembre del año pasado y mayo, calcularon una pérdida acumulada del salario real de un 12 por ciento, aunque el informe no dejó en claro si este número se ajustará con las paritarias que se cerraron después del quinto mes del año.

Este descenso del poder de compra también se expresó en la dieta, y el Instituto aseguró que hubo un cambio en la pauta de consumo. Las proteínas se reemplazaron por hidratos y las vitaminas por grasas en los hogares de trabajadores.

El índice incluye un relevamiento de precios propio del Instituto y utiliza estadísticas oficiales como el IPC de la ciudad de Buenos Aires, el Indec y el índice de San Luis. La encuesta nacional de gastos de los hogares 2012 y 2014 fue utilizada para definir el perfil de gasto.