Llaman a declarar a un sindicalista por el bloqueo a Lácteos Vidal: de qué se lo acusa
El conflicto en Lácteos Vidal comenzó en 2018 y cuatro años más tarde vinieron los despidos.
Se trata de Diego Alarcón, dirigente de la filial Trenque Lauquen de ATILRA. Podría ser imputado por el delito de «compulsión a la huelga».
En las últimas horas, y luego de un año, la Justicia llamó a indagatoria a uno de los supuestos responsables del bloqueo de Lácteos Vidal, por el delito de «compulsión a la huelga». Se trata de Diego Armando Alarcón, sindicalista de la seccional Trenque Lauquen de la Asociación de Trabajadores de la Industria Lechera de la Argentina (ATILRA).
El dirigente gremial fue citado a declarar el próximo 20 de septiembre ante el fiscal Martín Butti en esa ciudad bonaerense, y podría ser imputado en la causa penal por los bloqueos de 2022 en la planta que la firma tiene en Moctezuma, Buenos Aires, cuando se originó el conflicto por el que fueron despedidos 26 trabajadores.
«Es un paso enorme como antecedente para las empresas de nuestro país», dijo Juan Beluardo, abogado de la PyME láctea, quien explicó que esta persona fue encontrada en principio penalmente responsable del delito de compulsión a la huelga, ya que habría participado activamente de la toma.
Lácteos Vidal pedirá más imputaciones
«Eso significa que como integrante del gremio, porque es uno de los vocales (en la mencionada seccional), no veló por los derechos de los trabajadores, sino que los obligaba a participar del bloqueo, no permitiéndoles ingresar a trabajar con amenazas, coacción agravada, y es un antecedente», explicó.
Alarcón ya fue informado del inicio de la causa penal y ahora se avanzaría en su imputación por «compulsión a la huelga», dentro del artículo N°158 del código penal.
«Este es un antecedente muy favorable. Ni bien lo imputen nosotros vamos a pedir la imputación del secretario general, Gastón Moreno, pero también del secretario gremial del Consejo Directivo Nacional, Heber Ríos, y a los demás que estuvieron haciendo el bloqueo. Nosotros insistimos en que no fue una huelga, sino un bloqueo», remarcó Beluardo.
En tanto, el pasado martes se realizó otra audiencia entre los dueños de la PyME y ex trabajadores por el despido de más de una veintena de operarios tras el bloqueo el año pasado, pero las partes no llegaron a un acuerdo.
En el sindicato insisten con la reincorporación, mientras que Alejandra Bada Vázquez, la dueña de la empresa, propuso pagar toda la indemnización, pero eso no fue aceptado.
La acusación contra ATILRA
«Acá ya no tiene objeto una medida cautelar que me diga que no los puedo despedir o que los tengo que recontratar un año después de que los despedí, porque ya hay otra gente en esos lugares de trabajo. Esa medida cautelar es absurda, vieja y desubicada en el tiempo», señaló la titular de Lácteos Vidal.
Además, Bada Vázquez aseguró que ATILRA «usa el tema políticamente» y no tiene ningún interés en terminar con el conflicto: «El gremio hace amenazas y extorsiones para hacer la cooperativa. Ellos buscan quedarse con las empresas usando a los trabajadores».
También apuntó que «me quieren fundir a través de los astreintes (sanciones por la no reincorporación de los empleados) o meter gente adentro para que me vuelvan a hacer sabotaje, fundirme y quedarse con la empresa».
Y advirtió que «con esto pone en riesgo la fuente laboral de la gente que está trabajando, ya que la empresa tiene la buena voluntad del pago de las indemnizaciones aunque no les corresponda, con el solo hecho de terminar con este tema y puedan seguir con su vida. Es lamentable que una vez más el gremio no ejerza la personería gremial. En los hechos la perdieron, porque no los defiende».
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