El fallo de la Corte por la Coparticipación enturbió la paritaria estatal bonaerense
Kicillof ya había anunciado un incremento extra para docentes, estatales, médicos y judiciales.
Los gremios aseguran que la decisión «genera un marco desfavorable», que puede atentar con el pedido de aumento salarial antes de que finalice el año.
La reapertura de las paritarias estatales en la provincia de Buenos Aires generó poco entusiasmo en los gremios del sector, que se fueron de las distintas reuniones sin oferta salarial concreta y con signos de preocupación, en especial por la situación descripta por los funcionarios bonaerenses.
Esta semana, trabajadores de la administración pública, docentes y médicos le llevaron sus reclamos a los representantes de la gestión de Axel Kicillof, que tomaron notas de los reclamos y pidieron pasar en todos los casos a un cuarto intermedio para analizar los pedidos y ver las posibilidades de la Provincia de cubrirlas.
Si bien la promesa es que la semana próxima, cuando se reanuden los encuentros, haya números concretos sobre la mesa, la dirigencia sindical se mostró preocupada, y esperan que no se utilice el mismo mecanismo de octubre para cerrar la discusión, cuando se terminó entregando un aumento unilateral.
Las reuniones con los distintos gremios se suspendieron un día por el feriado del martes, decretado para festejar el título mundial de fútbol. En todos los casos, no hubo oferta, se escuchó los reclamos puntuales de los gremios y se pasó a un cuarto intermedio. En el sector educativo, los cinco gremios que forman el Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB) reclamaron «la urgente actualización del salario» para que se «mantenga la diferencia con los índices inflacionarios para que se garantice el poder adquisitivo de las y los docentes».
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Además, los gremialistas solicitaron que la actualización salarial correspondiente al último mes del año 2022 «se realice de manera prioritaria y urgente, y que se otorgue el pago de un bono de fin de año». Un documento del FUDB detalló que los sindicatos plantearon «la necesidad de que se convoque a partir de enero próximo a debatir la pauta salarial del 2023 con aumentos, tomando como base el cálculo de diciembre para el primer semestre y de junio para el segundo».
En octubre de este año, los estatales recibieron una nueva suba salarial que completó, con alguna mínima diferencia, un incremento salarial promedio del 90 por ciento. «Con estos números, el piso a alcanzar en este nuevo aumento es del 10 por ciento, 12 por ciento si queremos empatar a la inflación», le dijo a Gestión Sindical un dirigente del FUDB, presente en la cumbre.
Con este cálculo de base, el dirigente consultado dijo que «es difícil que logremos esa suba, no tuvimos ni una propuesta informal, y hubo algunos indicios sobre problemas para garantizar esta suba». Es que tanto a docentes como al resto de los estatales los funcionarios a cargo de las negociaciones remarcaron que el reciente fallo de la Corte Suprema de Justicia que quita coparticipación a la Provincia en beneficio de CABA «genera un marco desfavorable».
CICOP reclama
Con unas horas de diferencia, CICOP se reunió con la comitiva estatal, bajo la misma modalidad. Incluso se habló del fallo que recorta fondos por la coparticipación, algo que fue repudiado. «Este fallo y todo el proceso es repudiable, porque cuatro personas presiden sobre la voluntad de millones de personas», criticó Guillermo Pacagnini, secretario general del gremio.
En diálogo con Gestión Sindical, el dirigente afirmó que «este problema estructural tiene que ver con la coparticipación, pero más que nada con tener una provincia rica, la economía regional más importante del país y un Estado empobrecido, con salarios miserables, esa es la contradicción principal».
«Todas estas cosas, el endeudamiento de la Provincia, la raíz regresiva del sistema impositivo, es parte de la discusión, porque de eso salen los salarios», insistió Pacagnini. En este contexto, CICOP denunció que el presupuesto destinado a salud bajo en este tiempo, también producto de estas variantes. Por eso, en los reclamos del sector además del salario se ubicó la cuestión de los recursos, junto a recategorización de los profesionales, que vendría con una suba salarial «notable», además de blanquear muchos ítems de los salarios.
«Pedimos claridad en el acuerdo alcanzado por los residentes e ingresantes se concrete, ya que hay mucha incertidumbre por cuestiones burocráticas», destacó Pacagnini. Respecto al cuarto intermedio, el dirigente fue claro: «No creemos que la semana que viene hay citación, porque recién para el día 29 de diciembre van a citar la paritaria marco, la de la ley 10.430, por eso creemos que lamentablemente la de salud se cerrará en enero».
Bono de fin de año
Dos meses atrás, el gobernador Axel Kicillof acordó con los gremios un aumento salarial que a principios de diciembre representó un incremento anual acumulado de casi 90 por ciento. Las subas salariales se concretaron en octubre y en noviembre, con 8 puntos porcentuales cada una, y se elevó el piso de aumento de diciembre en distintos porcentajes según el gremio, para garantizar esa suba anual a todos los regímenes. Ahora, se busca llegar como mínimo al 100 por ciento, lo que marcan las proyecciones.
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En la discusión, el gremio ATE incluyó la necesidad de pagar un bono de fin de año, como se anunció para los estatales nacionales y como decretó el gobierno para los privados. «Avalamos la necesidad de que se instrumente un pago extra, cualquiera sea la modalidad, sin que esto condicione o limite el aumento salarial de diciembre, ya que ayuda a paliar la situación que estamos pasando los y las estatales por estos meses», dijo el gremio luego del encuentro, mediante un comunicado.
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