Caló: «Si los productores agropecuarios no entregan los cortes baratos, hay que expropiarlos»
El titular de la UOM embistió muy duro contra «los especuladores», para quienes pidió «mano dura» y dijo que «no pueden estar en la Argentina».
El secretario general de la UOM, Antonio Caló, fue muy categórico al referirse a los productores agropecuarios, a quienes definió como «especuladores» y dijo que «si no entregan los cortes baratos (de carne), hay que expropiarlos».
También le pidió al presidente Alberto Fernández que endurezca su posición con los formadores de precios: «Hay que ir hasta las últimas consecuencias. No puede ser que 5 o 10 vivos sean los que se la llevan del país».
Y, además, prometió el acompañamiento de la UOM al Ejecutivo en la denominada «guerra contra la inflación», que el máximo mandatario anunció que comienza este viernes.
«Si el presidente se pone al frente de esta pelea va a tener todo el apoyo del movimiento obrero», aseguró el gremialista.
La categórica frase de Caló
En declaraciones a El Destape Radio, puntualizó respecto a su crítica a los productores agropecuarios que amenazaron con quitar del mercado los cortes de carne a precios populares que «si no van a entregar los cortes baratos, no pueden estar en la Argentina. Hay que expropiarlos. Hay que poner mano dura. Y yo no soy de izquierda, eh».
Caló remarcó que «el sacrificio lo hacen los que trabajan y los que ganan son los que están detrás del escritorio». Por eso señaló que «hay que defender la mesa de los trabajadores. Fabricamos alimentos para 400 millones de personas y tenemos el 40% de gente debajo de la línea de pobreza».
En ese contexto justamente, y luego de que se conociera que la inflación del mes pasado fue del 4,7%, es que Alberto Fernández decidió emprender su «guerra contra la inflación», a la que Caló le brindó el apoyo.
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El primer mandatario convocó para el próximo lunes a los sectores empresariales y gremiales para empezar a acordar un paquete antiinflacionario. Una de las ideas sería incrementar en dos puntos las retenciones a las exportaciones de harina y aceite de soja, que ahora tributan una alícuota de 31%.
La mayor recaudación -equivalente a unos u$s400 millones anuales- se destinaría en su totalidad a financiar la estabilidad del precio de los farináceos. En especial, del pan.
La otra cuestión que se baraja tiene que ver con las retenciones a la carne y a la leche en polvo. Ambos productos tributan una alícuota del 9%, que podría elevarse al 15% sin necesidad de pedir autorización al Congreso.
A favor de las retenciones
El metalúrgico también se sumó a la postura del cotitular de la CGT, Héctor Daer, quien había respaldado una potencial suba de las retenciones a algunas exportaciones de granos para controlar los precios del mercado interno.
Respecto a esa medida que comenzó a circular en los últimos días como respuesta al aumento de los precios internacionales por la guerra en Ucrania, el dirigente de la Sanidad había manifestado que la medida «es efectiva» a la hora de «equilibrar el precio de los alimentos en la Argentina».
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Este jueves, Caló apoyó la posible medida: «Estoy de acuerdo con las retenciones. Todo lo que sea en beneficio de que los argentinos puedan comer mejor, lo voy a apoyar».
Y disparó: «Hay gente que tiene sus intereses y medios que defienden a sus patrones. Si quieren hacer cortes de rutas, que los hagan».
Además, resaltó que «el tema de la comida es innegociable». Por eso consideró que «hay que hacer lo que haga falta para defender la mesa de los trabajadores y de la gente. El pueblo va a acompañar eso».
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