La dirigencia de UTE y Ademys confirmaron que se inició la tercera semana de protestas en la Ciudad de Buenos Aires, contra la decisión de Horacio Rodríguez Larreta de no adherir a la virtualidad que ordenó el decreto presidencial.
Por tercera semana consecutiva, los gremios docentes UTE y Ademys iniciaron un paro de actividades en la Ciudad de Buenos Aires, contra la decisión del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta de mantener las clases presenciales, una puja que involucra al gobierno nacional y la justicia. Pese a los descuentos que se impuso a los docentes que pararon, este lunes se extendió el plan de lucha, “en defensa de la salud y la vida”, según afirmaron las entidades. En tanto, desde el Ministerio de Salud de CABA defendieron la decisión de mantener las escuelas abiertas.
“Una vez más, el Jefe de Gobierno porteño anunció en conferencia de prensa que continuará con su postura de incumplir el decreto nacional con el que se pretende bajar el número de casos de Covid-19 y aliviar el saturado sistema de salud”, afirmaron desde UTE mediante un comunicado. Con enorme masividad, agregó la entidad, “docentes, familias y estudiantes venimos luchando contra las mentiras y los anuncios engañosos con los que Larreta pretende seguir haciendo campaña política con la educación a costa de la salud y la vida de los ciudadanos de la Ciudad”.
A pesar de los descuentos, las protestas seguirán
El documento de la UTE, además, agregó: “Exigimos la continuidad del plan de vacunación que se encuentra detenido desde el mes de marzo tras el desvío de 17.342 dosis otorgadas por el Gobierno nacional y la urgente entrega de dispositivos y conectividad para que todos los estudiantes puedan sostener el vínculo pedagógico virtual”. “A pesar de las presiones y de los descuentos a nuestro salario seguiremos adelante convencidos que nuestra lucha salva vidas”, remarcaron.
La semana pasada, los gremios hicieron ante Gestión Sindical un balance de las dos primeras semanas de su plan de lucha, y acusaron al jefe de Gobierno de “negacionismo”.
Por su parte, desde Ademys afirmaron que los afiliados a ese sindicato, ya venían realizando protestas y medidas de fuerza «en reclamo del modo virtual para las clases en la Ciudad y la suspensión de las actividades escolares presenciales; la garantía de los recursos y la vacunación de los y las docentes».
La intransigencia del Gobierno de Larreta
Pese a esto, desde el gobierno porteño insisten con la medida, que incluye a los niveles inicial y medio, ya que se avanzó en la virtualidad de los alumnos secundarios. En este sentido, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, aseguró que «en la Ciudad seguimos creyendo que la presencialidad es esencial y posible porque los protocolos garantizan que las aulas sean seguras para chicos y docentes».
También señaló que esperan que «la resolución de la Corte ratifique lo que dice la Constitución, que en políticas educativas la Ciudad es autónoma para definir las modalidades»
En este punto, ratificó la presencialidad para las clases en los niveles inicial y primaria, y el esquema bimodal para la secundaria y la educación para adultos pasará a un formato virtual, al igual que las escuelas terciarias y los Centros de Formación Profesional, como parte de las medidas para contener los contagios de coronavirus.
Por otra parte, manifestó que «cada provincia tiene la autonomía para decidir» y opinó que solo a «algunas provincias han decidido quitarnos esa autonomía». «Ya nos equivocamos el año pasado anticipando el cierre de las aulas», sostuvo la funcionaria y añadió: «A los cuatro meses nos dimos cuenta que había sido demasiado temprano entonces este año no podemos cometer el mismo error».
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