Pese al rechazo de Nación, gremios docentes advierten: “Larreta va a insistir con abrir las escuelas”

El ministro de Educación Nicolás Trotta confirmó que se rechazó el protocolo presentado para que en septiembre más de 5 mil alumnos vuelvan a las clases presenciales. Pese a esto, la dirigencia cree que hay una necesidad de abrir por “la apertura económica”. Por el contrario, piden que se asegure conectividad y computadora a esos chicos en situación de vulnerabilidad.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

Pese al rechazo de los gremios y que la curva de contagios se mantiene alta, en los últimos días la Ciudad de Buenos Aires insistió en su idea de volver a las clases presenciales para aquellos alumnos que por distintos motivos no pudieron seguir la actividad virtual. La idea de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta es que las escuelas se abran para algo más de 5 mil chicos que detectaron fuera del sistema, la gran mayoría de barrios populares y sin acceso a Internet o sin computadora.

Ante la insistencia, el Ministerio de Educación nacional evaluó el protocolo que se pretende poner en marcha, y rechazó el plan oficial. “Lo que está claro es que el Estado debe ir hacia los chicos y no exponer al regreso a las aulas a un sector que tenemos que cuidar. Hay puntos del protocolo que no fueron cumplidos”, sostuvo el ministro Nicolás Trotta en declaraciones radiales. Pese a esto, en la Ciudad dieron pistas que se intentará seguir con esta idea, lo que pone en alerta a los gremios, “La actitud del gobierno porteño es criminal”, afirmaron, y pidieron que en lugar de insistir con esta propuesta se garantice el acceso a la virtualidad de los alumnos que no logran realizar sus tareas.

El rechazo de la cartera educativa al proyecto de volver a las clases presenciales el próximo mes algunos alumnos se formalizó este jueves, cuando el ministro Trotta ratificó la idea de mantener las escuelas cerradas. “Nosotros acordamos hace dos meses los mecanismos para el regreso a las clases y fue aprobado por las 23 provincias y la Ciudad. Ese protocolo indica que en cada distrito tiene que haber muy bajo nivel de contagios, que no es la realidad que transita la ciudad de Buenos Aires, que ayer tuvo 1.500 casos”, precisó.

Como respuesta, desde la Ciudad de Buenos Aires ratificaron de cierta manera el plan. En la conferencia de prensa diaria donde se informa la situación del Covid-19, la ministra de Educación Porteña Soledad Acuña ratificó el plan: “si creen que hay que cambiar el protocolo lo cambiaremos porque lo importante es abrir el espacio de las escuelas”. Además, la funcionaria dijo que la reapertura de las escuelas no fue firmada formalmente por la Ciudad y Nación, pero que sí “fue hablado, sino no lo hubiésemos anunciado”.

Ante esto, los gremios docentes se mantienen en alerta porque creen que la idea es mantener la propuesta activa. “La ministra Acuña se encargó de decir en todos los medios de comunicación que ellos van a seguir intentando la reapertura, y no se van a resignar a la negativa del Ministerio de Educación nacional, sabemos que van a seguir buscando la forma de hacerlo”, explicó María Isabel Grau, secretaria de Prensa del sindicato Ademys.

En diálogo con Gestión Sindical, la dirigente reafirmó que “al gobierno porteño lo que le preocupa no es la conectividad de los niños y niñas que no tuvieron actividad todos estos meses, sino la apertura económica, y para eso necesitan que los alumnos estén en la escuela para que los padres vayan a trabajar”. “Teniendo esa perspectiva política, van a seguir insistiendo, que van a modificar los protocolos hasta que se los aprueben, pero nos parece cada vez más criminal querer abrir la actividad con la cantidad de contagios de coronavirus que hay, que siguen aumentando”, sostuvo Grau.

Por su parte, desde el gremio UTE también descreen que se vaya a terminar el intento del gobierno porteño respecto de la apertura, y se mantienen expectantes. La secretaria de Comunicación del sindicato Paula Galigniana sostuvo ante la consulta de Gestión Sindical que “no podemos saber si este será el último intento o irán por otro”.

La dirigente aclaró que pese a la insistencia “necesitan autorización de Nación” para dar ese paso. Tanto Ademys como UTE fueron las dos organizaciones que encabezaron el rechazo a la apertura de escuelas, en una jurisdicción que tiene 17 gremios docentes. En este sentido, la ministra Acuña vinculó la postura a cuestiones políticas.

“En la Ciudad hay 17 gremios docentes que representan a los trabajadores de la educación, hay dos gremios que hacen política partidaria que lo hacen siempre, con las paritarias, con las evaluaciones, ahora con esto, el resto de los gremios están sentados con nosotros trabajando en una comisión mixta para establecer cuáles son las condiciones de trabajo adecuadas”, dijo Acuña en sus declaraciones públicas.

“Nosotros estamos revisando estudios internacionales, que se hicieron en el estado de Israel, en Francia, en Alemania, y vimos que cada vez que se abrieron las escuelas, se dispararon los casos de Covid-19, porque los chicos y los docentes son vector de contagio, y abrir las escuelas es poner en circulación a un momento de gente que hace que los contagios crezcan”, remarcó Grau, de Ademys. Según su opinión, abrir las escuelas en estos casos, o como sucedió en zonas de estados unidos, hace que “a los 15 días vuelva toda la población a fase 1, por eso decimos que es de una irresponsabilidad mayúscula”.

Por eso, Grau pidió “una decisión política” para integrar a los alumnos que no tiene actividad a la virtualidad. “No es que el gobierno de la Ciudad no tiene recursos para darle una computado, años atrás estuvo el sistema Wimax, que le da a cada alumno y docente un pen drive que permitía conectarse a las redes Wi-Fi de la Ciudad y así tener conectividad. Ese programa se eliminó”, contó Grau.

Hasta ahora, la única provincia argentina que volvió a clases presenciales es San Juan, que tiene buena parte de su territorio en fase 5, es decir que no tiene circulación comunitaria. Pese a esto, la vuelta no fue en los grandes centros urbanos de la provincia, y pese a los recaudos se produjeron varios casos en los últimos días.

En la apertura de las clases, hace dos semanas, el gobernador Sergio Uñac dijo que se extremaron “todos los cuidados, teniendo en cuenta y monitoreando en forma constante la situación epidemiológica” y señaló que “la mayoría de los padres y madres de los y las estudiantes” de estos 14 departamentos “hacen trabajos rurales durante jornadas muy extensas”, por lo que la vuelta a las aulas “será muy significativa desde lo educativo y lo social, por el lugar que ocupa la escuela para la organización familiar que se ha visto alterada con la pandemia”.