Aunque la UTA habla con el Gobierno, los colectivos están cada vez más cerca de parar el 30
Roberto Fernández, secretario general de la UTA.
La falta de acuerdo en la negociación salarial llevó a la UTA a endurecer una posición que venía siendo abierta al diálogo.
El secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, se lo dijo a los suyos en las últimas horas: si el sector empresario no ofrece mejoras salariales al menos en línea con la inflación, el paro es inevitable.
El de los colectivos es el único sector del transporte que aún no se sumó al paro nacional dispuesto para el 30 de octubre y que ya abarca aviones, trenes, subtes, taxis, camiones y transporte fluvial y marítimo.
La frase de Fernández llegó a oídos de los ejecutivos, que se quejan de la intransigencia del líder sindical mientras el Gobierno todavía no decidió qué camino tomar, con pocos interlocutores a cargo de la negociación.
El dirigente sindical es un hombre que está alineado a Luis Barrionuevo y no comulga con la administración de Javier Milei pero no es intransigente.
Al contrario, el tono hasta ahora ha sido el de no confrontar con el Gobierno. Pero siente que en esta oportunidad, el oficialismo, en tándem con las patronales, apuesta a dilatar las soluciones. Mientras tanto, el humor de las bases se recalienta, algo que preocupa en las altas esferas sindicales que no son ajenas a lo que pasa en el día a día de los trabajadores del área.
Por eso, Fernández está dispuesto a sumarse al paro nacional de transporte que lanzaron distintos gremios del sector, con Pablo Moyano de Camioneros a la cabeza.
El comunicado de la UTA
La huelga ya tiene el respaldo de Hugo Moyano, quien este martes se sacó una foto con Alejandro Gramajo, líder de la Unión de los Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), y Rodolfo Aguiar, el secretario general de ATE. Los dos hablaron con el patriarca gremial y le dijeron que lo estarán acompañando en la medida del 30 de octubre, que prometen que será histórica.
El hombre de la UTA es consciente del rol que juega para que la medida tenga fortaleza y ya avisó que está dispuesto a participar. El tono del comunicado que emitió en las últimas horas muestra también que está usando esta posibilidad como carta de negociación: le pide acciones concretas al Gobierno.
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«El Estado debe garantizar la protección de los trabajadores ya que como poder concedente, determina las tarifas y establece las condiciones del sistema de transporte, con lo que es el único que puede imponerse a las empresas para que eviten el paro y realicen un ofrecimiento similar», dijeron desde la UTA.
Y completaron con un pedido particular a la gestión libertaria: «Exigimos que se cumpla la Constitución Nacional y se proteja a los trabajadores que son el eslabón más débil de la estructura productiva de la sociedad. Que la autoridad de Transporte tome cartas en el asunto, se comprometa en un problema que es de su absoluta incumbencia y deje de esperar de brazos cruzados».
Qué dicen los empresarios
Los ejecutivos critican a Fernández y apuntan dos cuestiones en torno al conflicto: para que los salarios suban, las tarifas deben actualizarse, ya que siguen atrasadas en relación con la inflación acumulada de 2024 y, si no se igualan, los subsidios deben incrementarse. Son dos caminos que el Gobierno no quiere tomar, como ya ha expresado en algunas oportunidades de manera oficial y en diálogos extraoficiales.
Lo que dicen desde las cámaras es lo siguiente: «Hasta que no haya una novedad en ese sentido será difícil acordar, porque antes de ofrecer algo debemos saber cómo pagarlo».
Por lo pronto, Julio Cordero, el secretario de Trabajo, volvió a convocar a las partes para este jueves 24, en el último intento de acuerdo mientras corren los plazos de la conciliación obligatoria, que finaliza el 29 de octubre, justo un día antes de la fecha del paro.
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