Trabajadores textiles se declararon en estado de Alerta y Movilización: “Aún es tiempo de no volver a los ‘90”
Desde el gremio anunciaron protestas para “enfrentar un plan económico que aumenta las importaciones, en detrimento de la producción y el mercado interno”. También criticaron a empresarios “que rápidamente dejan de ser productores para convertirse en importadores”, provocando despidos.
La Asociación Obrera Textil de la República Argentina (AOTRA), que conduce Hugo Benítez, declaró hoy el Estado de Alerta y Movilización ante “la grave situación” que atraviesa el sector. Desde el gremio anunciaron protestas para “enfrentar un plan económico que aumenta las importaciones, en detrimento de la producción y el mercado interno”, enfatizando en que “aún es tiempo de no volver a los ‘90, si se apuesta al mercado interno y la producción nacional”.
En una solicitada publicada hoy en un medio gráfico nacional, desde AOTRA indicaron que “la Industria Textil es viable en la Argentina. Su buen funcionamiento garantiza el desarrollo del país, porque genera trabajo registrado que paga impuestos, algo indispensable para que el Estado cumpla con su obligación de brindar los servicios de Salud, Educación, Seguridad y Justicia. Por ello mismo nuestra organización siempre acompañó a la Industria Nacional”.
Desde AOTRA repudiaron “la actitud de algunos empresarios de nuestro sector que rápidamente dejan de ser productores para convertirse en importadores, como ya ha ocurrido en otras etapas de la historia de nuestro país, provocando despidos y suspensiones de trabajadores”.
Además, apuntaron a “pseudo-empresarios, que consiguieron a través de nuestra gestión percibir los programas repro-expres, para alivianar el pago de salarios, pero apenas terminó el subsidio estatal comenzaron con los despidos de compañeros, desaprovechando esta oportunidad para optimizar su funcionamiento y desarrollarse de manera competitiva”.
La decisión se tomó a partir de los informes presentados en el Plenario de Secretarios Generales Nacional, donde cada dirigente zonal expuso el estado de situación de la industria y la realidad que atraviesan los trabajadores textiles de cada provincia. “Se han puesto en práctica amenazas patronales, que incluyen el no pago de horas extras, suspensiones y despidos, pretendiendo supuestamente ganar competitividad a partir de un esquema de salarios bajos y flexibilizando el trabajo digno, incumpliendo los Convenios Colectivos y desconociendo las normas laborales que rigen los contratos de trabajo”, denunciaron.
“El propio gobierno nacional prometió en su campaña electoral velar por el trabajo existente y generar las condiciones para crear empleo genuino y calidad. Sin embargo hoy vivimos en un creciente momento de precariedad laboral, donde la fragilidad del sistema productivo termina profundizando la crisis del país”, analizaron.
“Nuestra organización sindical renueva su compromiso con las compañeras y compañeros textiles, con el mandato de defender el poder adquisitivo y los puestos de empleo en todo el país”, finalizaron, en el texto firmado por los miembros del Consejo Directivo Nacional.
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