Trabajadora municipal de Córdoba fue a la Justicia y ahora deben reincorporarla
Lo ordenó la jueza de feria Verónica Beltramone, quien resolvió que la trabajadora debe volver a sus funciones hasta tanto se resuelva la cuestión de fondo. Es el primer amparo posterior a la ola de despidos en los municipios del interior cordobés.
La jueza Verónica Beltramone hizo lugar ayer a un recurso de amparo que había presentado una empleada de la Municipalidad de Villa Santa Rosa de Río Primero para ser reincorporada a su puesto de trabajo.
La magistrada concedió la cautelar y ordenó al municipio que reincorpore a Beatriz Edith Amuchástegui -quien trabajaba en dicho municipio desde hacía cuatro años en calidad de contratada- hasta tanto se resuelva la cuestión de fondo.
El planteo judicial fue interpuesto durante la feria por el estudio jurídico del abogado Jorge Gentile y se trata del primero de este tipo, tras la ola de despidos que sufren cientos de empleados municipales del interior cordobés en este último tiempo.
En el caso de la Municipalidad de Santa Rosa de Río Primero, 15 empleados pertenecientes a planta permanente fueron despedidos a fines de diciembre por orden del nuevo intendente de la localidad, Víctor Kieffer (foto). Otros 21 -quienes habían sido efectivizados en octubre con el otro grupo de despedidos- continúan trabajando pero en calidad de contratados.
Además del caso de Amuchástegui, la jueza Beltramone podría resolver hoy otro amparo colectivo presentado por el estudio Gentile, que nuclea a otros nueve empleados de Santa Rosa de Río Primero. En esta presentación también se pide la reincorporación de los trabajadores despedidos.
“Sin dudas cuando se reanude la feria habrá una serie de planteos en los Tribunales”, adelantó a Comercio y Justicia el letrado cordobés, quien asegura haber recibido ya algunas consultas de empleados de Unquillo, también despedidos por ese municipio.
En el caso de Amuschátesgui, estaba contratada por la mencionada Municipalidad desde hacía cuatro años y había logrado la estabilidad laboral en octubre de 2015. En diciembre, el intendente anuló el decreto de estabilidad y la desvinculó. Ante esta situación, la mujer acudió a la Justicia y presentó un recurso de amparo. Otros 14 trabajadores -con la misma antigüedad- sufrieron la misma suerte.
De este grupo, 21 continuaron prestando servicio pero no como empleados de planta sino como contratados. En este último grupo algunos de ellos tienen una antigüedad de 18 años como empleados municipales.
La medida de la jueza de feria sienta precedente judicial ya que otros empleados que han sido echados en este último tiempo por otras municipalidades del interior cordobés podrían presentarse ante la Justicia reclamando que no se los puede desvincular por el principio de estabilidad laboral de que gozan los empleados públicos.
Unquillo
Desde comienzos de año, unos 150 empleados fueron despedidos y otros 32 sufrieron, por decreto, el recorte de sus recategorizaciones, que habían sido otorgadas por el exintendente Germán Jalil, en su último año de mandato.
Fuente: Comercio y Justicia
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