Tensión interna en el gremio de los visitadores médicos por la falta de paritarias en dos años

Algunos sindicatos independientes abandonaron la federación de sector para negociar directamente con los laboratorios productores de medicamentos. Desde la Asociación Agentes de Propaganda Médica niegan cualquier ruptura y calificaron como “vergonzosa” la actitud de esos grupos, que aclaran son minoritarios. Insisten con su pelea contra la flexibilización del convenio y las críticas al Ministerio de Trabajo.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

Desde hace casi dos años que los visitadores médicos no tienen paritarias. La negociación con la industria farmacéutica está estancada desde el 2016, cuando las tres cámaras que nuclean a los laboratorios productores de medicamentos del país decidieron reclamar a cambio de un aumento salarial cambios en la ley que rige la actividad de estos trabajadores. Ante la negativa del gremio, no hubo más ofertas salariales, y la situación se mantiene congelada de esta forma desde ese momento, sin que el Ministerio de Trabajo intervenga de alguna manera, más que llamando a audiencias infructuosas. En las últimas semanas, el tema comenzó a generar tensión interna, cuando algunos sectores de la Federación Argentina de Agentes de Propaganda Médica (FAAPROME) decidieron romper con este espacio, para negociar directamente con las empresas. La maniobra fue calificada como “vergonzosa” desde la conducción del gremio principal, la Asociación Agentes de Propaganda Médica de la República Argentina (AAPM), que rechazó cualquier interna o quiebre. Recordaron que hace unos meses se hizo un plebiscito para determinar si se mantenía la postura, y el si ganó por amplia mayoría.

En las últimas semanas, al menos cuatro seccionales de AAPM renunciaron a la FAAPROME, para poder negociar a nivel local con las cámaras farmacéuticas las paritarias, postergadas desde hace casi dos años. Las regionales son las de Rosario, Santa Fe, Mendoza y Entre Ríos, que para lograr un acuerdo propio debieron romper con la federación. El reclamo de las cámaras empresariales es una reforma a la llamada ley de profesionalidad, que rige la actividad de los visitadores médicos, y que entre otras cosas establece las normas éticas y laborales de la promoción de medicamentos. Como la conducción de AAPM, encabezada por Ricardo Peidro, rechaza esto al considerar “una extorsión”, la paritaria está congelada. “Es una vergüenza lo que hacen estos dirigentes”, le dijo a Gestión Sindical, Fabián Pennini, dirigente de APPM. Más allá de las renuncia, Pennini aseguró que los gremios salientes “son una absoluta minoría, el 90 por ciento de los visitadores médicos estamos firmes resistiendo el embate flexibilizador de los laboratorios”.

La paritaria está congelada porque además las empresas comenzaron una larga lucha contra la AAPM, e incluso hay casos de presiones para lograr la desafiliación de los trabajadores. En septiembre del año pasado, se realizó un plebiscito nacional para determinar si se mantenía esta postura y el pan de lucha, que incluso protestas y otras actividades en congresos profesionales. Con la presencia de veedores internacionales, las 30 secciones del sindicato en todo el país votaron mayoritariamente seguir en esta postura. Según los resultados oficiales, con el voto de más del 75 por ciento del padrón, el 98,5 de los visitadores votó por el “si”, es decir, respaldó la lucha iniciada por el gremio. “Estos grupos minoritarios rompen con la necesaria unidad de los trabajadores para luchar contra los abusos patronales”, se quejó Pennini.

La puja entre laboratorios y trabajadores se mantiene ante la lo que los visitadores médicos llaman “la mirada cómplice” del Ministerio de Trabajo. Pennini recordó que la industria farmacéutica es “promotora directa” de la reforma laboral que impulsa el gobierno. De hecho, la resistencia a los cambios en la ley es considerada por el sector como “la primera batalla contra los planes laborales que quiere imponer el gobierno nacional”. “En el marco de las imposiciones patronales de flexibilización y precarización de las condiciones de trabajo, la AAPM seguirá con la postura de no doblegarse ante la extorsión de la industria farmacéutica, a la vez que continuará respaldando todas las movilizaciones en defensa del salario, contra la flexibilización y las reformas laborales que signifiquen pérdida de derechos para nuestro pueblo”, destacó la conducción nacional mediante un comunicado, donde calificó de “pseudos dirigentes sindicales” a los que realizaron esta maniobra para firmar acuerdos locales.