16 de Septiembre
de 2024
Actualidad.

Sturzenegger y su modelo para los despidos: que cada empresa decida si indemniza o no

05. 09. 2024

Mientras espera la reglamentación de la reforma laboral, Federico Sturzenegger alienta también la flexibilización de los despidos.

El próximo paso del Gobierno ya está decidido: garantizar que cada empresa pueda despedir empleados a su modo. Es una idea del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, y se busca que el marco normativo esté listo en las próximas semanas.

“Van a poder diseñar el sistema de despidos que quieran”, anticipó el padre del DNU 70/2023 en una charla con empresarios.

En la secretaría de Trabajo de Julio Cordero sostienen la misma idea que Sturzenegger: que cada compañía decida su esquema de compensación para el personal despedido, eliminando la ley vigente que asegura indemnizaciones. Desde la UIA por lo menos ya dijeron que están de acuerdo con esta posibilidad.

Un artículo clave

El Gobierno se entusiasma con las chances que pueda brindar el artículo de la Ley Bases que lleva el título de Fondo de Cese Laboral.

Allí se expresa que las partes pueden salirse de la Ley de Contrato de Trabajo en lo que refiere a los despidos, un tema medular de la relación laboral. Pero además señalan que pueden avanzar casilleros para que la flexibilidad sea total.

Baja en ventas, caída en la producción y aumento de desempleo: un sector de la economía argentina, sin salida

Sturzenegger apuntó que cada empresa podrá seguir manteniendo la indemnización por ley, «ya sea un fondo individual como la UOCRA, un fondo solidario a nivel industria o contratar un seguro”.

De manera insólita, celebró la idea -propia- de que no haya una autoridad que regule el derecho al trabajo. “El Gobierno no dice nada, lo tienen que decidir ustedes, van a tener que tener mucha neurona», azuzó el ministro.

Asimismo, especificó que si alguna de las partes, ya sea la empresa o el trabajador no convalidan el acuerdo, tienen la potestad de desestimarlo, poniendo a ambas partes en un mismo nivel de fuerza. No obstante, lo traicionó el subconsciente y se contradijo cuando les avisó a los empresarios: «Lo tienen que decidir ustedes», sin mencionar negociación alguna con gremios o trabajadores.

Sturzenegger, enemigo número 1 de la obra pública

Como si fuera poco, en la misma alocución Sturzenegger expresó que mientras él pueda evitarlo, “la obra pública no vuelve más”.

despidos en el Estado
Sturzenegger ya tiene dónde mirar: los despidos sin causa fueron moneda corriente en el Estado en 2024.

En este punto, acusó, sin dar ninguna precisión, que «había un grupo de funcionarios que iban vendiendo las obras por los municipios y las provincias’ y señaló que ‘la obra pública era un mecanismo de corrupción y sometimiento político», ante lo que «hacía falta decisión para eliminar todo eso de un saque, y Javier Milei lo hizo».

En otro pasaje de su intervención, el ministro defendió el veto a la ley que aumentaría las jubilaciones, al afirmar que «no se puede emitir una ley sin ocuparse de los recursos», sumándose a la contradicción que vienen sosteniendo las principales voces del Gobierno, que hacen ese reclamo a la vez que avanzan en reducciones impositivas a las fortunas (sin ocuparse, en dichos casos, de los recursos que se pierden) y subsidios a grandes empresas.

“Si el Congreso quiere gastar, tiene que decir de dónde sale el dinero”, dijo, y buscando un guiño en el público manifestó: “¿Cómo fue que dejamos que en el Congreso se instale algo así?».

El desempleo, en niveles altos

Con un clásico discurso neoliberal, en La Libertad Avanza creen este tipo de medidas como la de facilitar los despidos, es un paso necesario para mitigar el desempleo, que se encuentra en niveles muy altos, algo que reconocen por lo bajo y que -genuinamente, en muchos casos- creen que podrán revertir con su reforma laboral.

Las cifras hablan por sí solas y marcan las consecuencias de las políticas de ajuste.

Aerolíneas Argentinas: los gremios se fueron sin nada de la reunión y se esperan más medidas de fuerza

La desocupación trepó hasta 7,7% en el primer trimestre del año. Así, ese indicador social desmejoró desde el 5,7% con que había cerrado el 2023 y desde el 6,9% del primer trimestre del año pasado.

Esto implicaría que hay, aproximadamente, unos 1,63 millones de personas desocupadas, lo que implicaría unos 415.900 desocupados más solo en el primer trimestre del año.

Esa cifra global está explicada por una destrucción de 612.500 empleos (81.600 registrados y 530.900 en la informalidad), mientras que 196.600 fue la disminución de la oferta laboral ante las dificultades advertidas para conseguir trabajo.

Es el nivel de desempleo más alto desde el segundo trimestre de 2021 cuando la economía aún salía de los efectos de la cuarentena estricta y las restricciones a la actividad económica.

Temas relacionados /
Suscribite a nuestro newsletter
Te puede interesar

Hacé tu comentario

Por si acaso, tu email no se mostrará ;)

Últimas Noticias en Zonales