Segundo trabajador que muere por coronavirus en empresa de seguridad aportante en campañas del macrismo: denuncian ocultamiento de contagios
Se trata de Juan Campos, trabajador que se desempeñaba en la estación de Retiro, área foco de la pandemia. Era empleado de la MURATA S.A, firma implicada en la causa de los aportantes truchos. Desde el sindicato de custodios denunciaron “actitud criminal” de la empresa, que obliga a trabajar a empleados comprendidos en los grupos de riesgo, no respeta ni los más mínimos protocolos, realiza “aprietes” y esconde los casos de Covid-19.
En las últimas horas se confirmó la muerte por Covid-19 de Juan Campos, empleado de seguridad de la empresa MURATA S.A y que desempeñaba tareas en el Ferrocarril San Martín. De esta manera, se suma al fallecimiento de Miguel Olmedo, otro trabajador que perdió la vida el 29 de mayo último, también por coronavirus.
Después de que se conoció la noticia del fallecimiento de Campos, segundo trabajador de esa firma que muere por el virus, desde el Sindicato Unidos Trabajadores Custodios Argentinos (SUTCA) denunciaron “la actitud criminal de la empresa de seguridad privada MURATA que presta servicios de custodia y vigilancia en la línea San Martín del ferrocarril”.
“La falta de los más básicos protocolos de prevención frente al coronavirus, denunciados por los propios trabajadores y que tuvo como única respuesta los aprietes y amenazas por parte del personal directivo de la empresa que se cobró una nueva vida”, agrega el texto.
Asimismo, los trabajadores aseguraron que la empresa “obliga a sus trabajadores, incluso a aquellos comprendidos dentro de los grupos de riesgo, a cumplir sus tareas sin protección alguna”, mientras que respecto al protocolo de actuación, advirtieron que “cuando se detectan casos positivos de Covid-19 no son aislados los demás trabajadores y solo la presión de sus empleados, familiares y organizaciones gremiales logra poner un freno parcial a una empresa que de seguridad poco conoce”.
Cabe recordar que 40 trabajadores del Ferrocarril San Martín –10 guardas y 30 de seguridad- se encontraban aislados desde que se confirmara la muerte de Miguel Olmedo, empleado de 64 años de la empresa Murata, con antecedentes coronarios y de hipertensión, que falleció el 29 de mayo luego de contraer Covid-19.
«Es histórica la impunidad con que se maneja MURATA, elenco estable de todas las ganadoras de las licitaciones habidas y por haber dentro de la Ciudad de Buenos Aires. Fuerte aportante en las campañas políticas de Mauricio Macri. Debido a la alta rotación de su personal, que puede pasar de un servicio a otro y de la Ciudad de Buenos Aires a la provincia y viceversa, esto puede traer consecuencias impredecibles», había dicho un comunicado del gremio SUTCA tras la muerte de Olmedo.
Hacé tu comentario