La idea de un empresario para las paritarias: «Que los trabajadores no se mueran de hambre pero que ganen menos»

El presidente de la empresa pesquera Conarpesa realizó polémicas declaraciones, mientras las negociaciones paritarias del sector siguen trabadas.

En una sorprendente provocación a los trabajadores, y en un contexto en el que la paritaria de la alimentación sigue trabada entre los representantes empresariales y la Federación de Trabajadores de Industrias de Alimentación (FTIA), el presidente de la empresa pesquera Conarpesa, Fernando Álvarez Castellano, expresó una particular idea para mejorar las exportaciones y ayudar a la recuperación del sector: bajarles los sueldos a los trabajadores.

«No pedimos que los trabajadores se mueran de hambre, sólo que ganen algo menos», expresó el empresario. Y trató de justificar su postura en la negociación salarial en el hecho de que «los precios en los exigentes mercados internacionales están por debajo de años anteriores, lo que ha dejado al sector en una situación por demás delicada«.

Para Álvarez Castellano, será necesario dar una fuerte discusión en las negociaciones de haberes, y dejó en claro su punto de vista de que las empresas deberán mantener posiciones firmes. 

En ese sentido dio a entender que se deberá reeditar la estrategia en el reciente antecedente de Rawson con el Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), cuando todo el arco empresario se plantó en conjunto.

«Es difícil pero van a tener que aceptar»

“Será muy importante cómo se encaren las paritarias. Si yo entiendo que los valores que se manejan son lógicos y le dan viabilidad a la operatoria, yo voy a acompañar, igual que hice en Rawson con el SOMU”, dijo Álvarez Castellano en declaraciones al medio sectorial Revista Puerto.

Además, habló de “llevarle una propuesta conjunta al Sindicato de Trabajadores de Industrias de Alimentación (STIA), donde la ecuación sea viable”. Y advirtió: “Va a ser difícil, así que me huelo que vamos a tener una temporada conflictiva con el STIA”.

Insistiendo en su postura, planteó que “es difícil resignar, pero lo van a tener que aceptar igual que pasó con el SOMU. No estamos diciendo que (los trabajadores) se mueran de hambre, simplemente que ganen algo menos para poder las plantas ser sostenibles”. 

Las dos CTA se mueven juntas de cara a un marzo que viene con paros, movilizaciones y protestas.

Y añadió: “Sobre todo para que las que ya están perdiendo, lo hagan menos. O que puedan ganar un poco, que sería lo lógico, porque para eso invirtieron, para eso pusieron su capital en riesgo, etcétera. Eso yo creo que cualquiera lo entiende, aunque luego no lo acepte”.

Luego consideró que “el problema es que los diferentes acuerdos que se han ido llegando a lo largo de los años, dan un monto que no es rentable. O sea, tenemos que pelear con plantas en Perú o en China, que pagan 400 o 500 dólares de sueldo mensual”. 

Las negociaciones paritarias, en cuarto intermedio

A la vez que explicó que “es difícil, yo lo entiendo, pero si queremos que sea sostenible la operación pesquera, algo vamos a tener que hacer de esto, porque ya los barcos no son rentables como lo eran antes”.

Por último, y más allá de su postura casi de victimización, el presidente de Conarpesa reconoció que “la temporada ha estado bastante bien, se ha trabajado sin conflictos. Además, hubo poco mal tiempo, así que la flota ha podido operar con normalidad, y los días de mal tiempo sirvió para que descansara la gente de las plantas, porque ha sido una temporada, en nuestro caso, intensa”.

Incluso no dudó en definir a la temporada como “buena”, diciendo que “solo nos queda pedir que suban un poco los precios”.

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Mientras tanto, la paritaria de la alimentación sumó otro fracaso y la negociación pasó a cuarto intermedio. Y eso es porque los empresarios del sector mantuvieron una oferta salarial por debajo de los valores de inflación, a contramano del gremio, que reclama una recomposición en los sueldos.

La última audiencia de negociación entre las partes tuvo lugar este miércoles, tras el traspié de la semana pasada. Y la FTIA volvió a rechazar la propuesta de la patronal, que «nada se corresponde con la necesidad de los trabajadores«.

Como en la reunión previa, la FTIA demandó a la cámara empresaria FIPAA un incremento salarial que supere la inflación oficial y las proyecciones de los próximos meses.