Papelón de “Caballo” Suárez al reclamar su reincorporación al SOMU: menos de una docena de personas lo acompañó en su marcha

El ex titular del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos fue expulsado de por vida de la entidad, a raíz de haber sido procesado y encarcelado por ser culpable de diversos delitos. Sólo un puñado de parientes y amigos lo acompañaron en la peregrinación de su protesta y pedido.

Menos de una docena de familiares y amigos acompañaron al procesado dirigente, Omar “Caballo” Suárez, a hacer su reclamo a la sede del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), con la intención que lo reincorporen a la entidad gremial. Cabe recordar que Suárez fue expulsado de por vida de esa institución por un Congreso Extraordinario que votó por unanimidad su desvinculación.

Esta mañana, a las 9, estaba programada la convocatoria en Parque Lezama. Allí se juntarían todos los manifestantes que convocó Omar “Caballo” Suárez para pedir que se lo vuelva a incorporar al SOMU. Falto algo crucial para esa queja: gente. Sólo un puñado de parientes y amigos lo acompañaron en la peregrinación.

Luego se dirigieron a la Obra Social del SOMU a reclamar por prestaciones que su gestión había dado de baja hace muchos años y que la nueva conducción, a cargo de Raúl Durdos, restituyó para todos sus afiliados.

Las autoridades del SOMU hacen hincapié en que “son raros y alarmantes sus movimientos, siempre cargados de violencia y amenazas”.

Omar “Caballo” Suarez estuvo preso desde septiembre de 2016 acusado y procesado por ser el “jefe y organizador de una asociación ilícita” y haber ejercido “coacción agravada” (extorsión) contra empresarios navieros, “administración fraudulenta” en detrimento del sindicato y de la obra social, fraude, asociación ilícita, lavado de dinero, bloqueo de los puertos y obstrucción de las vías navegables, entre otros ilícitos.

La intervención que lo sucedió detectó más de 100 irregularidades en su gestión, que viene desde 1992. En abril, el Tribunal Oral Nº 4 le permitió el beneficio de la detención domiciliaria por supuestos problemas de salud, con tobillera de control de arresto, fuera de una dependencia carcelaria.