22 de Noviembre
de 2024
Fuera de Megáfono. Informes Especiales.

Mercado laboral: confirman suba del empleo, pero en base a monotributistas y caída de la actividad

10. 11. 2017

Un informe del instituto CIFRA de la CTA de los Trabajadores puso reparos en los datos oficiales, que hablan de una recuperación en la creación de empleo. Afirma que lo que más creció fue el sector autónomo, y además hay más empleo estatal. Este año, el sector privado siguió perdiendo puestos laborales. El mercado se prepara para una nueva sacudida, con planes para reducir empleados en áreas del Estado.

La recuperación del empleo, en especial en el sector de la construcción, fue festejada por el gobierno, que durante la campaña electoral aseguró que en el país se está generando trabajo. Los últimos datos oficiales hablan de una tasa de desempleo del 8,7 por ciento, algo así como 1.600.000 personas. La reducción de este indicador no redujo la preocupación por un mercado laboral que muestra signos de reactivación, pero de manera irregular. La misma Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que difunde el INDEC proyecta que cerca de 4.700.000 argentinos tienen problemas laborales, ya sea que padecen el subempleo, el empleo en negro o son ocupados que buscan cambiar de trabajo. En este contexto, un trabajo de la CTA de los Trabajadores confirma esta tendencia, pero advierte que el empleo creado se basa en dos variantes: el aumento de los trabajadores monotributistas o autónomos y la caída de la actividad. El trabajo además vuelve a poner el foco en la caída del empleo industrial.

Como cada trimestre, el Centro de Investigación y Formación de la República Argentina (CIFRA) elaboró su informe de situación sobre el mercado laboral, la economía y el salario. La entidad de la CTA de los Trabajadores aceptó los dichos del oficialismo en materia de creación de empleo, pero en su desglose explicó los motivos del repunte, que tiene que ver con trabajadores autónomos y estatales. En el segundo trimestre del año, aseguró el trabajo al que tuvo acceso Gestión Sindical, “la desocupación afectó al 8,7 por ciento de la población económicamente activa, lo que representa una contracción con respecto al segundo trimestre de 2016 y un aumento de dos puntos frente a 2015”. Esta caída, explicó CIFRA, se explica “porque hay una menor cantidad de personas participando en el mercado de trabajo, empleadas o buscando un empleo”. En este sentido, se confirmó que la tasa de subocupación (personas que trabajan menos de 35 horas semanales y desean trabajar más horas) fue del 11 por ciento de la población activa. “El 67 por ciento de esas personas buscó activamente extender su jornada laboral (la tasa de subocupación demandante fue del 7,4 por ciento)”, agregó el informe.

Más allá de estos datos técnicos, en el gobierno festejan que haya más puestos laborales, algo que CIFRA admitió, pero puso el acento en la calidad del empleo creado. “Entre enero y julio de 2017 el total de trabajadores registrados creció 1,3 por ciento en comparación con el mismo período del año pasado. En 2016 el incremento había sido menor, del 0,7 por ciento”, comenzó el informe. En ambos períodos, explicó la entidad de la CTA de Hugo Yasky, “el crecimiento se explica por el aumento en la cantidad de trabajadores independientes (autónomos y monotributistas) y asalariados en el sector público”. “El primero de esos grupos se expandió 4,3 por ciento en los primeros siete meses de 2017, mientras que el segundo lo hizo a un ritmo menor (1,1 por ciento)”, informó. En cuanto al empleo público, tema muy discutido en especial en tiempos que se habla de reducir el gasto público, la suba de poco más de un punto parece desmentir al gobierno, que utilizó algunos casos puntuales (la biblioteca del Congreso) para volver a la carga contra la cantidad de estatales. Pese a esto, asalariados públicos y los trabajadores independientes explicaron todo el crecimiento de la ocupación registrada el año pasado, ya que el empleo privado “se contrajo en 2016 y comenzó una leve recuperación a partir de mayo de este año, que no compensó la contracción anterior”, de modo que los asalariados registrados en el sector privado son menos que en 2015.

Estas distorsiones que marca el informe de la CTA de los Trabajadores se pueden ver en el sector público y el privado. En el primero de ellos, existen rumores que el gobierno buscará reducir la cantidad de agentes. Esta semana, ATE Capital Federal le puso números a esta reducción: 20 por ciento de la plantilla actual. El dato surge de algunos informes que fueron llegando a manos de la dirigencia, y que podrían terminar con una ola de despidos similares a las que se dieron a inicios del 2016. Pero además, los estatales aseguran que existen algunas maniobras para precarizar el empleo. La más grave: pasar contratados a la categoría de monotributistas. “Hay muchos trabajadores que facturan al Estado o a través de convenios con universidades, por ejemplo. Ahora hay algunos funcionarios que ya avisaron a contratados que deberán pasarse a esa modalidad se quieren seguir trabajando en 2018”, aseguró una fuente del gremio estatal, ante la consulta de Gestión Sindical. Al ser monotributista, un empleado pierda muchos de sus beneficios, como el pago de aguinaldo, las vacaciones pagas o la estabilidad. Esto se pudo ver claramente en la provincia de Buenos Aires, donde el gobierno de María Eugenia Vidal desmanteló el programa Incluir salud, despidiendo a 160 empleados. La mayoría facturaba, y quedaron en la calle sin posibilidad de protesta, pese a que muchos llevaban hasta 8 años de antigüedad.

En cuanto al sector privado, la recuperación no llega. Industrias como la textil, del calzado, la metalúrgica y otras siguen sufriendo los mismos problemas. La reactivación parece una promesa lejana, y muchos sectores admiten que esperan que se termine de concretar la reforma laboral para finalmente decidirse a sumar personal. Entre otras cosas, esperan que se habiliten condiciones más flexibles de contratación, gracias a la discusión de los convenios en cada rama. Esto le hizo saber al gobierno la conducción de la Unión Industrial Argentina (UIA), que expresó su respaldo “a la filosofía y las líneas principales de la reforma tributaria y laboral que impulsa el Gobierno nacional”, aunque reclamó por el impacto que tendrá la mayor presión impositiva sobre los vinos, espumantes, cervezas y bebidas azucaradas, algo que estaría sería reformado en parte.

Suscribite a nuestro newsletter
Te puede interesar

Hacé tu comentario

Por si acaso, tu email no se mostrará ;)

Últimas Noticias en Zonales