La dirigencia sindical analizó la visita del presidente norteamericano, y hubo rechazos y gestos conciliatorios. Las dos versiones de la CTA coincidieron en su análisis, y repudiaron la presencia del presidente, en especial por la fecha. La CATT, representada en la gala de honor en el Centro cultural Kirchner.
El país –y el mundo –habla de la visita de Barack Obama a la Argentina, el presidente norteamericano que llegó en la madrugada del miércoles y que tendrá dos días de intensa actividad. En medio de la conmemoración de los 40 años del último golpe de Estado, hay división entre quienes saludan este encuentro como una vuelta de la Argentina al concierto mundial, y quienes creen que es “una provocación” por la fecha y la repudian. Entre los segundos se encuentran gran parte de la dirigencia sindical, en especial las dos fracciones de la CTA, que se expresaron en contra del mandatario. “La llegada de Obama no es bienvenida por los trabajadores”, aseguran, y se plantean manifestaciones y actos de repudio. Pese a esto, un grupo de referentes sindicales estarán esta noche en la cena de gala en homenaje al norteamericano.
Como sucedió con el acuerdo con los fondos buitres, las dos versiones de la CTA se mostraron unidad en el rechazo a la visita de Obama. Con la firma de Hugo Yasky y Carlos Girotti, la CTA de los Trabajadores emitió un comunicado donde aseguró que el presidente de Estados Unidos “no es bienvenido porque los trabajadores no olvidamos el rol activo de la CIA y del Pentágono en el exterminio selectivo de militantes y dirigentes de los movimientos populares de América Latina, perpetrados con la autorización de la Casa Blanca durante el denominado Plan Cóndor”.
“No es bienvenido tampoco porque viene a respaldar la decisión impulsada por el gobierno de Mauricio Macri de entregar soberanía, claudicando frente al juez Griesa y los Fondos Buitre, en lo que constituye la antesala del regreso a la picadora de carne del Fondo Monetario Internacional”, agregó la central. La CTa recordó que “la última vez que un presidente yanqui pisó la Argentina se fue con el portazo en la cara de un pueblo movilizado y de los presidentes latinoamericanos, que encabezados por Kirchner, Chávez y Lula le dijimos no al ALCA y al intento de convertirnos en su patio trasero.”
Por su parte, la CTA Autónoma de Pablo Micheli también repudió la visita de Obama. En un comunicado de prensa convocó a marchar mañana 24 de marzo “bajo la consigna 30 mil desaparecidos presentes y fuera Obama de la Argentina”. “El 24 de marzo de 1976 significa una fecha símbolo en nuestro país porque fue el inicio formal de una de las etapas históricas más terribles de toda la historia argentina. Lo que conmemoramos es no sólo la instauración de una dictadura cívico militar que hizo del terrorismo de Estado la herramienta para llevar adelante un genocidio, sino que recordamos con todo el afecto y todo el cariño que corresponde a las miles y miles de compañeros y compañeras que en virtud de la aplicación de ese terrorismo de Estado perdieron la vida y de todos aquellos que fueron perseguidos, presos, torturados, exiliados”, afirmó la central obrera.
“Hoy, a 40 años de aquel entonces, los trabajadores y trabajadoras argentinos estamos indignados que en esta fecha tan sensible para nuestro pueblo, Macri reciba la visita del presidente del imperio, absolutamente responsable de todas las miserias que llevó adelante Estados Unidos en este planeta, Barack Obama. Por eso decimos, no sólo 30 mil detenidos desaparecidos presente, sino también: fuera Obama de la Argentina”, concluyó la CTA.
Por su parte, la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) estará presente en la recepción que tendrá lugar en el Centro Cultural Kirchner y contará con la presencia de 400 invitados, entre los que se destacan figuras del oficialismo y la oposición. Según confirmaron desde la entidad, su titular Juan Carlos Schmid y el maquinista Omar maturano serán de la partida de la cena, Que entre otros tendrá al diputado nacional y titular de Petroleros privados Alberto Roberti entre los invitados.
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