La justicia ordenó a la empresa Siam reincorporar a una delegada y dos despedidos

Un juzgado laboral hizo lugar a un amparo, y la delegada Alejandra Vercellino y otros dos despedidos de la firma ubicada en la localidad de Avellaneda. Es el primer amparo que obliga a la empresa a reincorporar personal, luego de los 20 despidos de noviembre del año pasado. En el sur, sigue la sangría de trabajadores: cerró una multinacional china en Lanús y dejo 200 personas en la calle.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

Antes de que finalice 2018, luego de varias semanas de lucha, gracias a un acuerdo alcanzado en el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires la empresa de heladeras Siam reincorporó a 10 despedidos de los 20 que fueron cesanteados a principio de noviembre. La larga lucha de los trabajadores logró torcer el brazo a la empresa ubicada en la localidad de Avellaneda, que cumplió con el acuerdo unos días después. Ahora, este fin de semana se conoció una nueva victoria en el lugar; la justicia ordenó la vuelta a sus lugares de trabajo de tres empleados más, entre ellos una delegada.

De esta forma, sólo quedan siete despedidos que no pudieron volver a sus puestos, por lo que el conflicto sigue vigente.

Para los empleados, este paso es “producto de la lucha”, y prometieron mantener el plan de lucha hasta que “todos los compañeros esté adentro” de la fábrica. La pelea en el sur del gran Buenos Aires movilizó a organizaciones sociales y otros gremios, y se volvió símbolo de la crisis laboral, ya que Siam, una histórica firma nacional, abrió sus puertas en 2014 prometiendo una millonaria inversión y la generación de cientos de puestos de trabajo, pero en los últimos años redujo su planta de empleados varias veces.

Pese al triunfo, la región sigue sumando problemas laborales: ahora cerró una multinacional china en el partido de Lanús, dejando casi 200 trabajadores en la calle.

Esta semana, Alejandra Vercellino deberá volver a su puesto en la planta Siam de Avellaneda. Así lo determinó un fallo del Juzgado Laboral N° 41, que favorece a la delegada y dos despedidos más.

Luego del acuerdo en la cartera laboral que permitió el ingreso de 10 empleados, este nuevo triunfo del plan de lucha acerca al conflicto a su fin, aunque los empleados dijeron que mantendrán las medidas de fuerza hasta que vuelvan todos a sus puestos”.

Según el fallo cautelar, los tres empleados deberán ser reinstalados de forma inmediata a sus puestos de trabajo, pero como sucedió antes con el acuerdo en el Ministerio de Trabajo, la empresa no cumple con la orden. “Buscan dilatar el conflicto, como hicieron antes, cuando firman un acuerdo y luego no lo cumplen.

No acatar el fallo es ilegal, y si no acatan lo que dice la justicia tomaremos las medidas legales al respecto. Estas son las primeras tres cautelares que hemos logrado”, le dijo a Gestión Sindical uno de los empleados de la firma, que prefirió el anonimato para evitar represarías.

Ya en agosto de 2018 se dieron los primeros despidos, además de un plan de retiros voluntarios, que hicieron que 80 personas dejaran la tradicional firma nacional, productora de heladeras. En noviembre, 20 operarios fueron despedidos de la planta, lo que llevó el total de cesanteados en los últimos dos años a 165 trabajadores. Ante la grave situación, la fábrica sólo mantiene activo un turno, y emplea a unas 60 personas, muy lejos de las metas de años atrás, cuando volvió a abrir las puertas en un acto en 2014, donde estuvo la entonces presidenta de la nación Cristina Fernández de Kirchner.

A partir de allí, los empleados comenzaron un plan de lucha, para intentar revertir la situación. “Estas reincorporaciones son producto de la enorme lucha que venimos dando por la reinstalación de todos los despedidos, aún continua la pelea y vamos por más”, destacaron los trabajadores.

Los obreros recordaron que la empresa había prometido generar 600 puestos de trabajo, pero en los últimos meses despidió a 165 trabajadores, hoy solamente quedan 60 en la planta, y 20 de nosotros estamos enfrentando los despidos, junto a nuestras familias”.

Lanús: 200 despidos en empresa china

El triunfo de los trabajadores de Siam contrasta con los problemas que viene sufriendo el gran Buenos Aires en materia de despidos. Desde el cierre de la planta Canale en la localidad de Llavallol a los despidos en Cresta Roja, la crisis laboral golpea fuerte en el sur del conurbano. la semana pasada, luego de dar vacaciones a todo su personal, la firma de origen chino Cofco anunció informalmente que no volverá a abrir sus puertas, dejando a 195 personas sin trabajo.

La firma informó que por la caída de la demanda interna dejará de refinar aceite, y mantendrá sus actividades en las tres plantas restantes, ubicadas en el interior provincial (Junín) y dos en la provincia de Santa Fe. “La industria de refinación de aceites se ha visto afectada por una importante baja en la demanda local y creciente capacidad ociosa”, informó la empresa mediante un comunicado.

Según sus directivos, “se han explorado todas las alternativas posibles pero se ha concluido que la continuidad de la actividad no es posible”. “Cofco International Argentina dejará de participar en el negocio de aceites refinados y focalizará inversiones en originación, procesamiento de semillas oleaginosas y la exportación de cereales y productos derivados de la molienda de soja y girasol”, fue el comunicado que la empresa difundió días atrás”, agregaron.

Ante esto, los empleados iniciaron un acampe frete a la planta, ubicada en Valentín Alsina, partido de Lanús. Según le comentaron a Gestión Sindical algunos de los damnificados por el cierre, la empresa no envió telegramas ni notificaciones sobre la situación laboral, pero los directivos les comunicaron informalmente que la empresa cerrará esa ubicación.

Con casi 200 empleados, esta multinacional china (que abrió sus puertas en 2014, igual que Siam), es una de las grandes competidoras del sector aceiterom y los empleados sospechan que el cierre busca “condicionar al gobierno”, por algunas medidas que tomó en el sector. “No hay crisis, lo que hay es una respuesta a la suspensión en la baja de los derechos de exportación de la harina y el aceite de soja“, explicaron. En el acampe, que busca evitar que se vacíe el lugar, hay empleados junto con el gremio aceitero, además de otras organizaciones sindicales y sociales.