La CTA de los Trabajadores descartó “por el momento” la unidad con Pablo Micheli

La central que conduce Hugo Yasky decidió iniciar el proceso de renovación de autoridades de forma individual, por lo que no habrá unidad con el sector que conduce el estatal, cada vez más aislado. “Por el momento no hay condiciones”, afirman en la central. Roberto Baradel aparece como candidato a suceder al actual secretario general.

Diego Lanese / Especial para Gestión Sindical

A mediados el marzo de este año, la fracción Perón de la CTA Autónoma confirmó su alejamiento de la conducción de Pablo Micheli, y aprobó un cronograma electoral que le permitirá convertirse en una nueva central obrera, alejada del espacio que conduce el estatal. la movida, que deberá confirmarse en un congreso extraordinario el próximo 28 de abril, fue un golpe para el dirigente, que quedó aislado y con un apoyo minoritario de quienes no se fueron con el espacio que lidera Ricardo Peidro y el titular de ATE nacional, Hugo “Cachorro” Godoy. Ante esto, se esperaba que el proceso de unidad que comenzaron hace un tiempo la Micheli y Hugo Yasky se acrecentara. Pero la CTA de los Trabajadores decidió ir por su cuenta a elecciones, lo que frena de alguna manera el proceso de acercamiento entre las partes. “La unidad quedará para una etapa posterior”, aseguran en esa central. Así, se confirma que las tres fracciones de la central alternativa forjan sus propios caminos, lejos de la unidad, que podría darse más adelante, cuando estén todas las autoridades constituidas. El docente Roberto Baradel aparece como el sucesor de Yasky, que todavía no decidió si buscará un nuevo mandato.

Luego que la fracción Perón y la que responde a Micheli confirmaran sus elecciones, la CTA de los Trabajadores hizo lo propio. Luego de un congreso nacional celebrado a fines de febrero, se confirmó los comicios para septiembre de este año, en fecha a designar. De esta forma, este año las tres versiones tendrán nuevas autoridades, en un proceso de fractura que lleva 8 años. “Vamos a renovar las autoridades en septiembre de este año, en fecha a confirmar”, sostuvo Pedro Wasiejko, secretario Adjunto de la central obrera. En diálogo con Gestión Sindical, el dirigente explicó que pese a que hubo conversaciones con el sector de Micheli “se decidió realizar el proceso de manera individual, y dejar la posibilidad de una unidad para más adelante, una vez que estén consolidadas las nuevas autoridades”. En este sentido, el dirigente del neumático ratificó el acercamiento con el secretario general de la CTA Autónoma, pero más vinculado “a la unidad en la acción” que a una unificación formal. “Por el momento no hay condiciones, coincidimos en varios puntos, pero cada espacio trabajará con autonomía”, dijo Wasiejko.

En las elecciones, deberán renovar las autoridades nacionales, más las provinciales y las seccionales regionales. Yasky lleva dos períodos al frente de la central, desde el 2010, cuando se fracturó la conducción. El año pasado, fue elegido diputado nacional por Unidad Ciudadana, y se cree que pude dejar su espacio a otro dirigente. El nombre que más suena en el entorno de la CTA es el de Roberto Baradel, el titular del gremio docente SUTEBA, que por su perfil opositor se volvió una referencia desde que Cambiemos es gobierno. Actual secretario general de la CTA de los Trabajadores bonaerense, ya es miembro de la mesa nacional y de la CTERA, el gremio nacional docente. “Sería un paso lógico”, afirman en el entorno de la central, sobre una sucesión de Baradel a Yasky. Pero todavía hay debate. “Hay compañeros dispuestos a asumir esta responsabilidad, es necesario que haya renovación, pero en el contexto actual necesitamos los mejores hombres”, agregaron, ante la consulta de Gestión Sindical.

De esta forma, Micheli deberá conformarse con formalizar su conducción con un espacio reducido a lo mínimo. Así quedó expuesto en Mar del Plata, cuando se decidió llamar a elecciones. en el mismo se llamó a fortalecer un espacio de unidad con otros sectores que enfrenten al gobierno, pero por el momento parece no tomar cuerpo. En tanto, como adelantó Gestión Sindical, la fracción Perón inició el proceso para formalizar su salida de la CTA Autónoma, y desmarcarse de su secretario general. Con apoyo de gremios de izquierda y clasista, se prepara para la ruptura final, y se diferencia de Micheli incluso en la concurrencia a actividades masivas, como la marcha del 21 de febrero. En ese espacio se espera que Yasky y Micheli puedan convivir, aunque sin formalizar la unidad. En tanto desde la CTA de los Trabajadores adelantaron que la próxima gran movilización del espacio nacido alrededor del moyanismo y la Corriente Federal sería el 1º de mayo. “Vamos a coincidir en estos eventos, y después trataremos de volver a hablar de unidad, pero antes vamos a hacer nuestras elecciones”, subrayó Wasiejko.