Industricidio: Puma cierra otra planta, despide y reemplaza producción por importación
La marca deportiva profundiza su ajuste y baja las persianas de su segunda fábrica en la provincia desde 2017.
La marca deportiva Puma, operada por Unisol, continúa con su fuerte proceso de ajuste en la Argentina. Cerró su segunda planta en la provincia de La Rioja en menos de dos años. En marzo de 2017, bajó la persiana de la fábrica de Sanagasta y dejo sin trabajo a 100 empleados y ahora le tocó el turno a Chilecito, donde despidió a 40 trabajadores.
La marcha atrás comenzó a fines de diciembre de 2016, cuando cerró la pyme argentina Herzo de San Luis y despidió a 200 trabajadores, luego de proveer a Puma durante casi 30 años. El apoderado de Herzo, Marcelo Iglesias, dijo en el cierre: «la situación del mercado argentino nos llevó a discontinuar la actividad. No podemos competir con los productos importados que comenzaron a entrar al país desde fin de 2015».
En marzo de 2017, Puma cerró la planta de Sanagasta y comenzó un ajuste que incluyó 30 despidos en la planta de la capital riojana y 40 en Chilecito. Le quedan dos fábricas, una en La Rioja Capital y otra muy pequeña en Chamical.
Saúl Carrizo, secretario general de la Unión de Trabajadores de la Industria del Calzado en La Rioja, explicó a BAE Negocios: «Puma llegó a tener 980 trabajadores en la provincia, pero hace dos años empezó a despedir y cerrar plantas. Hoy son menos de 460. En Chamical eran 200 y quedan 80 trabajadores».
La secretaria de Trabajo de La Rioja, Miriam Espinoza, aseguró que Unisol no planea cerrar sus plantas de Chamical y de La Rioja Capital. Sin embargo, el panorama es complicado. En la empresa ningún vocero tiene autorización para hablar.
El secretario general del sindicato del calzado riojano explicó: «la entrada de producto importado mató a la industria nacional. Antes el 80% de lo que vendía Puma se producía en el país, ahora apenas llega al 10. Tomaron la decisión de cerrar la planta porque ahora importarán lo que se realizaba en el país».
A diferencia de lo que aseguró el sindicato del calzado en La Rioja, donde Puma tiene sus únicas dos plantas, la empresa explicó que el 60% de lo que produce es de fabricación nacional. «La fábrica de ensamble en La Rioja es la más grande del país, produce 1,3 millones de pares de zapatillas al año», señaló en un comunicado.
Puma bautizó al ajuste como «eficientización productiva», puntualizó que cerró la planta de Chilecito por los cambios tecnológicos en la producción de capellada y para garantizar la continuidad del negocio y asegurar los puestos de trabajo de 800 personas. Resalta que es la única marca deportiva que integra la producción y comercialización de sus productos a través de sus plantas y sus 30 tiendas.
Hacé tu comentario