Indignante: empresa de seguridad aportante en campañas del macrismo es denunciada por hostigar a familiares de trabajadores fallecidos por Covid-19
Familiares de empleados fallecidos en la empresa de seguridad Murata denuncian hostilidades por parte de la firma.
Miguel Angel Olmedo tenía 64 años al momento de su fallecimiento, que ocurrió el pasado 28 de mayo. Contrajo coronavirus mientras prestaba servicios en empresa de seguridad Murata, donde tenía 12 años de antigüedad. Era persona de riesgo, y debía estar licenciado bajo el decreto 207/2020. Sin embargo, fue obligado a cumplir funciones en la ex Villa 31. Casi seis meses después, sus familiares continúan exigiendo justicia. Además, denuncian hostilidades por parte de los encargados de la firma y exigen que intervengan los organismos de control.
A través de un comunicado, Nidia, la hija de Olmedo, detalló cómo los encargados de la firma acosaron a su hermano Oscar, quien también era empleado de la empresa y ahora se encuentra bajo tratamiento psiquiátrico: “El 28 de octubre fue citado mi hermano por Murata para que evalúe un psicólogo si estaba apto para trabajar, o si debía seguir con el reposo indicado por su psiquiatra debido al shock post traumático ante la pérdida de nuestro padre. Y cuando el psicólogo Daniel Macagnoni lo estaba evaluando, entró Yamil González (encargado operativo de la empresa) para provocarlo y hostigarlo”.
Nidia agregó “Yamil miraba a mi hermano y se reía. Tuve que levantar la voz diciendo que toda la situación que se estaba dando no era nada seria, ni ética. Ahí se asomaron dos empleados que se llevaron a esta persona, quien se fue sonriendo como si nada”. Y dijo que “fue tremendo el esfuerzo que hice para contener las ganas de reclamarle por todas las injurias a las que sometió a Luis, mi otro hermano (despedido hace más de un año), además de todo el abuso laboral al que sometieron a mi padre, hasta llegar a su muerte”.
A Olmedo le faltaban sólo tres meses para jubilarse en la empresa de seguridad privada que pertenece al comisario exonerado Roberto Reglewski, y que es una de las principales aportantes de la campaña del ex presidente Mauricio Macri. Y si bien cuando comenzó la pandemia Murata le dio dos semanas de licencia, cuando el aislamiento fue extendido la compañía lo intimó para que se reincorpore a su tarea. Con un agravante: originalmente él trabajaba en el Cementerio de la Recoleta, pero le cambiaron su objetivo y lo enviaron a un barrio popular en un momento de pico de contagios.
La voz del SUTCA
“Sin dudas lo que hicieron, con el cambio de su lugar de trabajo, fue castigarlo. Es la forma en la que se maneja siempre Murata con la idea de disciplinar así a sus trabajadores. No hay ninguna duda de que la muerte del compañero Olmedo fue culpa absoluta de la empresa”, le dijo Daniel Jacobsen, secretario de prensa del Sindicato Unidos Trabajadores Custodios Argentinos (SUTCA), a Gestión Sindical.
Y agregó: “Se trata de una empresa explotadora, que no sólo en su momento no le pagó la licencia como correspondía, sino que lo apretó para que vuelva a trabajar. Y con el agravante de destinarlo a un lugar, un parador del Gobierno de la Ciudad para niños en situación de calle, que estaba ubicado en la entrada de la Villa 31 de Retiro, donde en ese momento estaba el pico de contagio de la enfermedad”.
Además, como en su momento denunciara David Fabián Berstein, el abogado de la familia, no le dieron mascarilla plástica de protección, ni alcohol en gel, ni guantes de látex. Y el barbijo se lo tuvo que proveer él mismo. “Nada sorprende en el accionar de esta empresa. Yo trabajé en Murata, y vi el maltrato permanente y el desprecio que tienen por los trabajdores”, aseguró Jacobsen.
Finalmente, a los pocos días del traslado, Olmedo contrajo coronavirus y dos semanas después falleció. Hoy en día, todavía la empresa, sobre la que pesa una denuncia penal, no depositó siquiera su liquidación final ni la indemnización por muerte.
El fallecimiento de Olmedo no fue el único que se dio en Mura desde el inicio del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio: otros cinco trabajadores pertenecientes a la empresa de seguridad perdieron la vida mientras trabajaban. Ellos son Atilio Acosta, Néstor Farias, Claudio Andrades, Juan Campos y Valeria Páez.
Además, son constantes las denuncias de los trabajadores de la empresa Murata respecto a las condiciones laborales a las que son expuestos. Por ejemplo, cuentan, deben hacerlo “situaciones inhumanas, en garitas que no tiene los medios de higiene ni baños, y sin los mínimos elementos de seguridad”. Jacobsen, al respecto, dijo que “en este país hay dos justicias: una para rico y una para pobres. Por eso los trabajadores viven estas situaciones”. Y advirtió: “Desde SUTCA vamos a acompañar a los familiares en su lucha para que estos casos no queden impune”.
Fuertes y turbios vínculos con el macrismo
Es histórica la impunidad con que se maneja Murata, elenco estable “ganador” de todas las licitaciones habidas y por haber dentro de la Ciudad de Buenos Aires y fuerte aportante en las campañas políticas de Mauricio Macri.
Debido a la alta rotación de su personal, que puede pasar de un servicio a otro y de la Ciudad de Buenos Aires a la provincia y viceversa, esto puede traer consecuencias impredecibles
yo trabaje 3 meses ahi, el gerente general yaml gonzalez es un violento, y nadie hace nada al respecto. Somete a las chicas de la central operativa, las maltrata, las insulta y nadie hace nada. todo el tiempo te amenaza con despedirte y te obliga a contestar mensajes a cualqier hora porque sino te despide, no podes salir de vacaciones sin su permiso, n i irte un finde largo, no podes ir a la casa de tus compañeros ni juntarte fuera del trabajo porque tambien te despide, asi como tambien no podes fichar 1 minuto tarde literal. si no haces lo que el quiere te despide pero antes de eso te grita, te humilla y te basurea adelante de todos. tanto con hombres como mujeres. el y su mujer .