Facundo Moyano busca frenar los despidos de 500 trabajadores de peajes que quedarán en un limbo
El SUTPA de Facundo Moyano, en alerta por la situación de tres rutas nacionales.
El SUTPA de Facundo Moyano se encuentra en alerta por la situación de las rutas 12, 14 y 174 en las que por unos meses no se pagará peaje debido a que el Gobierno demoró la licitación.
El Sindicato Único de Trabajadores de Peajes y Afines (SUTPA), que tiene como principales referentes a Florencia Cañabate y Facundo Moyano, está en acción ante la posibilidad de que la firma que tiene en concesión los peajes de las rutas 12, 14 y 174 despida a 500 trabajadores. Este escenario llevó al gremio a declarar el estado de alerta y movilización.
Los dirigentes sindicales comenzaron hace una semana a realizar asambleas en las estaciones de peaje de las rutas que, hasta el 8 de abril, están controladas por Caminos del Río Uruguay (CRUSA).
Luego de esa fecha, cuando vence la concesión, no hay certezas sobre qué pasará con los empleos ya que desde el Ejecutivo de Javier Milei se informó que, en principio, dejarán de cobrar peaje hasta tanto se lleve a cabo una nueva licitación que según lo previsto demandará al menos seis meses.
Hasta el momento, los pedidos de información se encontraron con un silencio total por parte de la empresa y del Gobierno nacional.
“A días de dicha finalización, los trabajadores no reciben garantías sobre su continuidad laboral, lo que genera un clima de tensión, incertidumbre y preocupación en todo el sector. En este contexto, entendemos que hay muchas soluciones posibles y viables, pero nos encontramos ante la falta de voluntad de Vialidad Nacional”, denunciaron desde el SUTPA.
Además, el gremio advirtió sobre el impacto económico de esta situación en toda la región de las rutas, al señalar que “las consecuencias no solo impactarán en los trabajadores de peajes, sino que también afectarán a las economías regionales”.
Qué plantea el gremio de Facundo Moyano
Para el SUTPA, uno de los caminos que se podría tomar pasa por prorrogar el contrato de concesión a CRUSA hasta la toma de posesión de quien resulte adjudicatario de la licitación.
El segundo es avanzar con el traspaso de los trabajadores a Corredores Viales por el tiempo que dure el proceso licitatorio para que luego sean incorporados a la nueva concesionaria.
Sin hacer referencia concreta a la Dirección de Vialidad Nacional, que quedaría a cargo de las rutas mientas no se vuelvan a concesionar, desde el sindicato de Moyano y Cañabate le apuntaron al ente gubernamental caminero.
“Es inadmisible que pretendan dejar este corredor fundamental para el comercio internacional de la Argentina en manos de quienes fueron los artífices y responsables de la desidia y el abandono de las rutas de nuestro país y refugio de varios personajes sospechados de estar ligados a maniobras de corrupción de la obra pública”, dispararon.
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Además, pidieron que el Gobierno tome dimensión de la urgencia de resolución “de este conflicto que además pone en riesgo la seguridad de miles de usuarios».
Reclamos de otro sindicato de peajes
Al tema también se refirió Gustavo Rossi, secretario general de la Unión Empleados de la Construcción y Afines (UECARA) que tiene en sus filas a trabajadores de peajes de algunas provincias.
«La decisión de no renovar es política y respetable», opinó Rossi, pero avisó que, «el Estado no tiene la infraestructura ni el personal adecuado para hacerse cargo» y manifestó que, «Vialidad Nacional se ha convertido en una gran oficina sin operatividad».
Además, Rossi criticó la falta de planificación: «El fin de la concesión es el 8 de abril, pero la nueva licitación recién será en septiembre u octubre. ¿Qué pasa con esos trabajadores en ese lapso?». A su vez, comentó que, «esto no es déficit cero, esto es distribuir desempleo en el sector privado».
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