En lo que va del año cerraron 500 casas de deportes y se perdieron 5.000 puestos de trabajo en Capital y Gran Buenos Aires
Son números de un relevamiento de la ONG Defendamos Buenos Aires. En total, cerraron 270 comercios del rubro en CABA y 230 en el conurbano y La Plata.
La profundización de la grave situación económica golpea de lleno tanto en el consumo como en los comercios y un informe de la ONG Defendamos Buenos Aires arrojó que 500 casas de deportes cerraron en lo que va del año en Capital Federal y el conurbano. Los datos fueron difundidos a través de la Encuesta Mensual Económica (EME).
La entidad, con la asistencia del Estudio Miglino y Abogados, orientó su estudio al desempeño de la actividad comercial de las casas de deportes que venden desde calzado deportivo a ropa deportiva, accesorios, mochilas y elementos para la práctica de todo tipo de deportes. Entonces, confirmó el panorama “desolador” del sector. El mismo se hizo en 35 núcleos urbanos de la Capital Federal y 50 en la Provincia de Buenos Aires, incluida La Plata.
En ese sentido, relevaron que desde enero hasta septiembre de este año cerraron 230 casas en el territorio bonaerense y 270 en CABA. Asimismo, señalaron que los comercios “en general una plantilla de 10 personas, entre propietario y empleados. Es decir que con el cierre de 500 establecimientos, 5.000 personas fueron a la calle”.
Al respecto, Javier Miglino, director de Defendamos Buenos Aires, relató que “Adidas ha cerrado plantas, Nike despidió a la mayoría de los empleados de su armadora en El Dorado, Misiones y sigue la sangría de marcas de elite. Con la ropa pasa lo mismo y obviamente con el último eslabón de la cadena comercial: la casa de deportes”.
“Por caso en San Martín sobre la colectora de la Avenida General Paz y Avenida San Martín había un negocio de 80 metros de frente y dos niveles, exclusivamente de ropa deportiva. Trabajaban en el lugar 50 personas. Vendían ropa, zapatillas y accesorios de 20 marcas diferentes, camisetas de futbol de todos los equipos y los fines de semana había colas de una cuadra para entrar. Hoy todo eso ha desaparecido. El lugar cerró y con el poco producido de las últimas ventas se indemnizó al personal”, añadió.
Sobre las causas de los cierres, expresó que se debe a “un salvaje tarifazo de luz, gas, agua e impuestos como el ABL. Más un considerable aumento del alquiler, aumento de sueldos y una inflación que no permitió la reposición de los productos vendidos; con lo que si se vendían 10 pares de zapatillas, se reponían solo 5. A todo esto se sumó la profunda recesión que se instaló en la administración Macri y que muchos avizoran será muy larga. El resultado fue menores ventas, a valores por debajo del costo y gastos de nivel europeo. Ningún negocio puede resistir semejante ataque”.
Hacé tu comentario