La educación como servicio esencial: Suteba ya se moviliza y llama a un paro para que la ley no avance en el senado
La Cámara de Diputados le dio media sanción al proyecto que declara a la educación como servicio esencial.
El Diputados ya se aprobó la ley que declara a la educación como servicio esencial. Cómo es el proyecto que restringe el derecho a huelga.
Directivos del colectivo sindical docente Suteba salieron a cruzar el proyecto que impulsa el Gobierno con la oposición dialoguista que busca declarar a la educación como servicio esencial y que ya obtuvo media sanción en la Cámara de Diputados. Y quieren que todo el sindicalismo se empiece a mover para que la iniciativa no avance en el Senado.
Para el ala gremial de la línea más combativa de Suteba, la Multicolor, con las dirigentes gremiales de izquierda Nathalia González y Paula Akerfeld a la cabeza, ,a propuesta busca que la educación deje de ser un derecho social y además, limitaría el derecho constitucional a huelga con el objetivo de minimizar las interrupciones en las clases.
En ese marco, mantuvieron asambleas en las últimas horas y llamaron a un paro, reclamánole a CTERA, el principal sindicato docente de la Argentina, que avance rápidamente hacia un paro general en contra del proyecto.
“Buscan atacar el derecho a huelga de docentes y no docentes que son quienes sostenemos la educación pública con nuestro esfuerzo, bajos salarios y múltiples cargos para sobrevivir», indicaron desde Suteba. «Es irracional proponer que con el 30% de trabajadores funcione una escuela con el 100% de estudiantes. Quieren atar de pies y manos a la docencia que pelea contra el desfinanciamiento educativo”, agregaron.
A su vez, entienden que son muchos los sectores de la comunidad educativa que consideran que la declaración de la educación como servicio esencial podría tener implicancias significativas en la “calidad” del sistema educativo. Y marcan que habrá judicialización de la medida.
Otra voz, desde Ademys
Federico Puy, de Ademys, sindicato docente de la Ciudad de Buenos Aires, declaró: «Milei quiere hacer punta con una política que comparte con Macri, Bullrich, pero que ha tenido el apoyo de Sergio Massa, e incluso Cristina Kirchner ya dijo que hay que trabajar con los chicos adentro. Es una política que piden el FMI, las cámaras comerciales y las grandes patronales”.
También indicó que en momentos en que Milei y los gobernadores “quieren ser los mejores alumnos del FMI”, “reducir el déficit fiscal” significa recortar cada vez más el ya magro presupuesto educativo: menos obras, menos y peor alimento para “pibes que engrosan las filas de la pobreza, menos libros, peores salarios”.
“Coartando las herramientas para enfrentar esto, abren paso para fortalecer la educación privada como la única posible para quienes pueden pagar”, agregó.
Educación como servicio esencial: el proyecto
La propuesta aprobada en la Cámara Baja fue consensuada por La Libertad Avanza (LLA), el PRO y los bloques de la «oposición dialoguista».
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La iniciativa declara servicio esencial a la educación pero -a contramano de lo que promueve el propio Gobierno en otros temas como, por caso, el jubilatorio- no establece ninguna mejora presupuestaria en correlación con la esencialidad. La idea fue criticada por la propia Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Lo que sí prevé el proyecto de ley es establecer un piso mínimo de actividad a garantizar durante los días de paro, por lo que los gremios y los bloques de la oposición denunciaron que busca restringir el derecho a huelga.
El proyecto busca modificar el Artículo N° 3 de la Ley de Educación Nacional para incorporar allí la creación de un «Sistema de Guardias Mínimas Obligatorias». El Inciso C de ese artículo prevé, así, mecanismos para garantizar las guardias en caso de «medidas de acción directa, indirecta, paro o huelga docente o no docente».
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