Desalojaron a los trabajadores de la Algodonera Avellaneda, empresa de Vicentin
Esta madrugada la policía de Santa Fe ejecutó la orden del juez Santiago Banegas e intimaron a los trabajadores a abandonar el lugar. Los empleados llevaban 70 días reclamando sueldos adeudados y mejoras salariales. Analizan cómo continuar las protestas.
Por Claudio Garibotto
En la madrugada de este viernes la Policía de Santa Fe desalojó a los trabajadores de la Algodonera Avellaneda -perteneciente al Grupo Vicentin-, quienes desde hace 70 días reclaman salarios atrasados y mejoras salariales, manifestándose en el Parque Industrial de Reconquista. Unos 200 policías y unos 15 patrulleros llegaron hasta el predio con una orden judicial firmada por el juez Santiago Banegas, e intimaron a los trabajadores a abandonar el lugar, quienes no se resistieron y lo hicieron pacíficamente.
“Estamos viendo ahora cómo seguimos, porque ya hicimos marchas, manifestaciones y cortamos la ruta, y no logramos nada. Todos los compañeros están un poco desanimados. Ahora está previsto para el martes una conciliación en el Ministerio de Trabajo de la ciudad. Pero seguramente, como ya pasó antes, los dueños de la empresa no se presenten”, anticipó Sonia Zanel, delegada de aceiteros.
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Sonia también explicó que en ningún momento ellos realizaron un bloqueo en la planta: “La Policía es la que lo califica de esa forma, pero es importante aclarar que nosotros nos manifestamos todo este tiempo realizando un acampe, pero sin bloquear los ingresos”. Y dijo que “estamos enfrentando al Grupo Vicentin y sabemos que esto no es fácil. Desde que empezamos con el paro estamos siendo presionados por los fiscales, los jueces y la Policía. Es una vergüenza que los trabajadores seamos tratados como delincuentes cuando los verdaderos delincuentes son los dueños de Vicentin, que le roban al Banco Nación y al país”.
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Los empleados de la algodonera reciben un sueldo de entre 20 mil y 25 mil pesos, sin antigüedad, con turnos rotativos y sin horario fijo. Y en junio habían realizado un reclamo porque la empresa pagaba parte del salario con carne del frigorífico Friar y aceite de Aceitera Vicentin, también propiedad del Grupo. Además de esto, hace diez días una patota que respondía a las órdenes de Héctor Luis Viscay, abogado del grupo Vicentin, atropelló a dos delegadas que estaban acampando en el ingreso al Parque Industrial, lo que terminó de tensar totalmente el conflicto.
“Todo lo que pasa es una vergüenza. Y el desalojo fue un golpe más, y bastante duro, para todos los compañeros. Tenemos que decidir cómo seguir. Pero no vamos a dejar de defender nuestros derechos”, advirtió Sonia.
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